¿Espectro? || Herobrine x Steve

five

Visitar a Alex era una verdadera aventura, ella vivía muy lejos de la aldea de Steve, podían acortar el camino si viajaban por el Nether, y aún así se tardaba en llegar con ella, y ahora se encontraban construyendo vías para hacer el camino más rápido. Supuso que podría hacer casi la mitad del viaje en las vías que ya estaban terminadas, las que llevaban de su pueblo a otro de pescadores, podía tal vez recuperarse allí si resultaba herido ya sea por aquel Espectro o cualquier otra criatura del Nether, aunque quizás ahora prefería ser atacado por un Ghast que por esa extraña criatura.

Al menos los dos días de encierro estaban funcionando para algo, y agradecía que esa criatura no se le hubiera aparecido durante esos días, tal vez era la calma antes de la tormenta y debía huir de ahí antes de ser alcanzado. Y dejar de pensar mucho en eso y concentrarse en su planificación del trayecto a casa de Alex, aunque estuvieran relacionados.

Alex, ¿Por qué tenías que vivir tan lejos?

Y nada le aseguraba que ella estaría en casa, ya que probablemente estaría de viaje, pero bueno, podría entrar a su casa e ir directo a la biblioteca, sabía cómo entrar, aunque preferiría que ella estuviera allí, preferiría no estar solo con Firu con el peligro de que ese Espectro lo acechara.

Bien, ya había pensado mucho, sus heridas ya estaban un poco mejor, salvo por la quemadura en su nuca ya que no había podido colocar ninguna cataplasma o ungüento correctamente, pero no para mucho, una molestia no lo detendría, incluso si se veía obligado a escaparse, solo esperaba que la criatura le tuviera piedad y lo dejara salir sin problemas del pueblo, no quería llamar la atención de nadie y mucho menos del clérigo.

Así preparó lo necesario para el viaje si iba por el Nether, su espada y su escudo, el refuerzo de oro para sus botas, también agua y una poción de resistencia al fuego, que aunque hacia años que no caía en lava o tropezaba en las llamas le era todavía útil por qué le evitaba la deshidratación de las altas temperaturas. Si, ya llevaba también algo de comida.

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Así al llegar la noche salió con sumo cuidado, ocultándose tanto de los demás aldeanos como de las criaturas hostiles de la noche, no quería armar un escándalo, quería llegar al portal sin contratiempos.

Atravesó el pueblo en un extraño silencio que no sabía si agradecer o preocuparse, pero lo aprovecharía. Inevitablemente, dejaba sus huellas en la nieve, pero usualmente caía una nevisca en la madrugada así que tal vez sus huellas y las de Firu serían ocultadas y el clérigo no sabría exactamente a dónde fue.

Si, parecía que todo iba bien, ¿No?

Estática.

Eso era nuevo, pero le erizó los pelos de la nuca. Miro a todas direcciones, pero no pudo encontrar nada y al mirar a Firu dudó de si el ruido venía de una fuente externa o solo era mental, porque el lobo no reaccionaba, se obligó a avanzar por si acaso, no queriendo perder tiempo aunque sentía la necesidad de detenerse e ir a revisar, su espíritu y costumbre de inspeccionar el área, pero ahora no podía darse el lujo de ello.

«Avanza, avanza» Se repetía mentalmente, y ahora estaba casi corriendo, sin importar que la estática aumentará en volumen, tenía que llegar al portal y se alegró internamente cuando vio el destello morado en la oscuridad, hasta que en un punto la estática se escuchó demasiado alto, tomándolo en el suelo y obligandolo a taparse los oídos para amortiguar el sonido, pero sentía que no había ningún cambio, solo vio a Firu ladrar y no sabía si era por qué él también escuchaba el ruido o porque esa criatura también estaba ahí, cualquiera de las dos parecía mala ahora, pero como llegó la estática se fue, dejándolo mareado, pero Firu seguía ladrando y él no veía nada.

— Firu... Firu...

Llamó a su amigo, pero de repente comenzó a gruñir. Había algo cerca. No quería ver y se levantó tan rápido como pudo, tomó a Firu como pudo porque se agitaba para zafarse y corrió al portal donde entró a la luz morada antes de sentir el familiar mareo y la penumbra morada casi oscura. Siempre pensó que viajar al Nether era como entrar en agua, como se sentía su cuerpo como en agua calida que a veces lo molesta porque no es ni caliente ni fría, y lo confunde, pasar por agua a un lugar donde el agua se evapora rápidamente.

Después cayó en el suelo, no anticipó su salida mientras se perdía en sus pensamientos, pero no importó mucho, se echó a la carrera de nuevo corriendo a las vías y a las vagonetas, subió a una y avanzó.

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Herobrine no sabía que pensar de lo que acababa de ver. Steve había saltado a esa luz y había desaparecido, ya había mirado todo alrededor y no había ningún rastro ¿Realmente había desaparecido? No entendía como y cuando él intentó entrar en la luz morada no pudo, o no como Steve, él solo atravesaba la luz apareciendo por el otro lado del portal y no creía que así fuera como lo hizo Steve, él estaba dejando huellas y el otro ni siquiera eso.

Eso lo comenzaba a hartar de más, le empezaba a dar un dolor en el pecho, era algo físico y no solo mental a como estaba acostumbrado por la ira y enojo constante, y eso lo molestaba, ¡¿Dónde demonios estaba Steve?! Se empezó a arañar los brazos, sacándose sangre oscura, pero las heridas sanaban rápido, casi igualando la velocidad con la que él se volvía a abrir la carne.

Se estaba desesperando.

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¿Había sido muy duro con Steve? Se había comenzado a preocupar por el chico cuando no lo vio por ningún lado no había escuchado nada de él. Sabía que Steve era un chico fuerte en casi todo sentido, y que muy difícilmente se tomaría a mal cualquier acción, pero igual seguía siendo un ser humano y tenía límites, y sabía cuánto significaba el salir y explorar para Steve.

Tras pensarlo, el clérigo se dirigió a la casa de Steve, dispuesto a hablar con él y aclarar las cosas. Llegando tocó a la puerta, llamado a Steve, pero preocupándose al no obtener ningún tipo de respuesta, ni siquiera de Firu y ahora estaba confundido.

Tal vez fuera algo invasivo pero tenía un mal presentimiento así que abrió la puerta, sabiendo que Steve nunca le ponía seguro, y no sabía si sorprenderse o no cuando encontró la casa vacía.

Negó con la cabeza, molesto con el chico por su imprudencia y desobediencia, ¿Cómo se atrevía a salir así? Ya tenía de muchas cosas que hablar con él.

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1140 palabras

HELLOOOOOO
Aquí su cereal favorito, Frootloops
Estoy feliz de estar de vuelta, al fin
tengo algo de orden en mi vida y
espero volver a Wattpad con más
regularidad y seguir actualizando
esta historia.

Y feliz de anunciar que entre a la universidad
¡Urra por mi!
La verdad, no siento que me merezca
felicitaciones porque entre a la universidad
privada y no hice examen, pero bueno, me
sorprendo de mi misma como he llegado
hasta aquí, jajajaja, nose como sigo viva.

Espero volver a hablar con ustedes
en el siguiente capítulo.

Buenos días, buenas tardes, buenas noches.

:)

— Frootloops. 07/09/24