leyendo: poder para la venganza y otros universos

CAPITULO 6

La ‘lucha’ se intensifico, muros de piedra y agua bloquearon su camino. Piedra era cortada como si fuera papel, el agua era un problema, ya que en realidad le dolía, lo mataba, pero los usuarios también eran los que pagaban por llamar al agua en espacios tan reducidos.

Una unidad entera fue aniquilada por los riachuelos de agua que corrían por la pendiente hacia ellos, sin darse cuenta de que sus simples sandalias no ofician suficiente conexión a tierra para detener la oleada, sus cuerpos espasmódicos estaban en la parte de atrás, flotando como peces deshuesados.

"¿es que acaso son idiotas? ven que esta cubierto de rayo super potente y lo primero que se les ocurre hacer es atacarlo con agua y mas encima en un lugar tan cerrado" dijo atenea asombrada por la estupidez de esos ninja.

Al darse de que se estaba esforzando tanto, arremetió en lugar de solo hacer un gesto y ver las consecuencias.

Llegando profundamente, tiro de ese ardor, dejo que fluyera desde su centro y atreves de sus brazos y dedos, imaginando algo para lidiar con todos ellos y permitirle alcanzar su objetivo mucho mas rápido.

“¡OROCHIMARU!”

 No se había dado cuenta siquiera de que había hablado, su mano derecha atacando con dedos en forma de ganchos y cinco grandes arcos de relámpagos azul pálido desgarrando el pasillo y a los ninjas.

Cinco surcos perfectos en las paredes y el suelo, todos los ninjas cayendo en pedazos, ya que se partieron en pedazos.

No había sangre, las heridas fueron cauterizadas, los lugares donde los rayos del pensamiento simplemente no estaban allí.

Al ver la puerta al final del pasillo, sacó la otra mano y, para su sorpresa, una gran lanza de relámpago con púas atravesó la puerta antes de que el acero se derritiera para revelar su objetivo, uno que lo miraba con los ojos muy abiertos.

"Guau nisiquiera lo intenta o sabe que esta haciendo y aun asi es tan poderoso" dijo thalia con un poco de envidia al ver el control que tenia naruto con el rayo

Justo en frente del hombre estaba la promesa, el adolecente lucia como si estuviera tratando de comprender lo que estaba viendo.

Kabuto había dado un paso atrás al ver la carnicería que estaba a su paso, no había pensado en el grupo un segundo, tenía una meta, ¡Y estaba ahí!

cuando dio un paso adelante, una mujer con cabello purpura  apareció ante el, sus brazos cubiertos con hojas de cristal, sus propias manos se levantaron en reflejo para bloquear, la mujer hizo una mueca cuando la electricidad comenzó recorrer sus brazos, “ ¡No dejare que lo mates!”

por primera vez, sus ojos azul profundo se posaron en sus propios ojos azul oscuro, ojos tan parecidos a los que nunca volverá a ver. “¿Es preciado para ti?”

su voz era suave, pero parecía vibrar con poder, enviando escalofríos por su columna que no tenían nada que ver con los arcos de poder de sus manos. “¡Si! ¡El me salvo de las purgas!”

los ojos parecieron parpadear con reconocimiento por un momento, “La guerra de Kiri, ¿Te salvo?”

“¡Si!”

“¿Y por eso vas a morir por el?”

“¡sin pensarlo!”

Una pequeña sombra de una sonrisa se formo, “Alégrate de que te ayudaron ese día, pero eso significa que debes vivir por el, no morir por el…”

El poder se desvaneció, estaba tan sorprendida que la lucha se había desvanecido que estaba desequilibrada antes de que su mano regresara casi perezosamente, pasando por la parte posterior de su cuello antes de que comenzara a tener espasmos una vez mas, la electricidad bailaba por ella y por su columna vertebral.