Lo Que Me Permitió Estar Contigo (Shifting)

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Reika lavaba sus dientes mientras intentaba no quedarse dormida de pie, su desordenado cabello mostraba que recién se había levantado.

-Wueños... Ñias...- Reí saludo bostezando

-Buenas- Reika también bostezó

-¿Que tal te ha ido en la clase?-

-Siento sobre salgo un montón, mis instintos se desarrollaron por la Asociación, es difícil ocultar eso-

-Te entiendo, en la última actividad de equipo que me pusieron quedé en primer lugar por hacerlo en poco tiempo... Según Vlad sensei a la mayoría de novatos les hubiera tomado 20-30 minutos y yo la hice en 6... Se siente raro hacer ejercicios donde tu integridad física o tu vida no se ve involucrada-

-Lo sé, ¿Crees que los maestros sospechen de la Asociación?-

-Tal vez... Pero no pueden hacer nada contra ella... El gobierno la respalda, quiza quieren usarnos para averiguar sus actividades-

-Me siento rara que hagan eso, no somos herramientas-

-No todos tienen el mismo pensamiento... Bueno, iré a cambiarme hoy me toca el desayuno, apúrate para que me ayudes con el almuerzo o llegaremos tarde y tendremos que ir a la cafetería-

-Si, si, ya te escuché-

Ella fue a su habitación para cambiarse, mientras se ponía la corbata Yang rascaba un mueble mientras jugaba, en eso tiro varias cosas del librero y el gato salió huyendo, ella suspiró y recogió los libros, al ponerlos en su lugar se encontró con un compartimiento secreto, no se acordaba de ese pequeño espacio, era el lugar donde había ocultado el diario de "Melissa" habían pasado años desde que lo tenía pero jamás lo había abierto, ahora que controlaba mejor su kosei podría abrir esa cerradura, se sentó en su cama y trato de abrir dicho diario hasta que escucho el clic.

-Bueno eso fue fácil- al abrirlo se encontró con una introducción en inglés

"Hola mi nombre es Melissa y tengo 9 años, me dieron este diario para que pueda escribir sobre mi día a día en la Asociación, unas personas me recogieron del orfanato donde vivía... Creo que me trasladaron, aunque vine hasta Japón, antes vivía en Chicago, Estados Unidos, no entiendo nada de lo que las Personas aquí me dicen pero me dicen que me acostumbraré pronto, el director dice que mi kosei es valioso así que me enseñaran a usarlo... Pero a mí me da mucho miedo; sin embargo, me dicen que aquí hay niños iguales a mí que me sentiré como en una familia, jamás tuve una, así que estoy emocionada"

Reika paso la página era sobre un nuevo día y el entrenamiento que se había llevado a cabo, como había sido halagada por su kosei y lo mucho que quería esforzarse, como había conocido nuevas personas y se había hecho amiga de varios niños, en especial de un niño llamado Taehee.

-¿Taehee?-

-¡Reika!- el grito de Rei la hizo saltar- Con un carajo, te dije debías ir a ayudarme y te encuentro leyendo un libro-

-No es solo un libro, ¿Recuerdas que mencionaste a Melissa la única que fue nivel 5?-

-Ah si ¿Por qué lo mencionas?- ella le enseña el diario

-Esto creo que es de ella-

-Hay cientos de Melissas en el mundo-

-Si pero... Creo que es la misma ya que... Menciona a Taehee-

-¡¿Que cosa?!- el chico entro a la habitación y se sentó a su lado, ella le mostró el diario- Oye ¿Es en serio? ¿De dónde sacaste ésto?-

-Un día lo encontré debajo de mi cama en la Asociación, estaba pegado muy al fondo, casi ni se veía, pero me lo traje por impulso, no lo abrí antes por qué su cerradura me lo impedía y no podía controlar bien mi kosei -