Save me.
La UAC recibió un extraño caso en dónde varias familias habían aparecido asesinadas pero lo más extraño eran las escenas del crimen, parecía que una sola persona estaba matando a las personas pero eran varias las que participan. Era como si fuera una lección de asesinato.
El caso les había llevado varios días. Especialmente Spencer había estado metido en el caso sin descansar, había algo en el que no lo dejaba dormir.
-¿Sera una familia de asesinos?- Pregunto Emily.
-Pareciera que otras personas estuvieran enseñándole al ignoto como matar. Las heridas y formas de muerte son todas diferentes y lo único en que coinciden es la poca predisposición del ignoto en querer matar.- Agrego Morgan.
-No quiere hacerlo.- Finalizó Spencer con un tono extraño.
Los miembros del equipo se miraron un poco confundidos, usualmente el joven doctor no era alguien que se quedará tan pensativo viendo un caso.
-Garcia busca familias aisladas de la ciudad con antecedentes y un solo hijo.- Ordeno Hotch al teléfono.
-No será necesario.- Respondío desde el otro lado de la línea.- La policía acaba de recibir un llamado de una chica, parece que confesó el asesinato de sus padres.
-Envia la ubicación, estamos en camino.- Dijo Hotch y todos los siguieron a la salida casi corriendo.
En el camino hablaron de como iban a proceder.
-Llego a su límite.- Comento JJ.- Se canso de asesinar y su única solución fue arrancar el problema de raíz.
-Matando a sus propios padres.- Agrego Emily.
-Debe estar en un estado ajeno a ella.- Dijo Morgan.- Debes entrar con calma para que no quiera hacer algo sin pensar, debemos contenerla.
-Yo lo haré.- Hablo seguro Spencer y el resto del equipo asintió un poco confundidos.
...
Nadie podía salvarme.
El viento golpeaba mi rostro, la vista desde la terraza de esa casa vieja era maravillosa. La sangre humedece mi vestido, sus colores claros como el agua se transformaron en un oscuro bermellón.
No quise hacerlo, no quería matarlos.
Las luces se veían a lo lejos y las sirenas comenzaban a acercarse. Sabía que pronto iban a llegar y con eso también mi fin, pero estaba bien. Yo me había rendido.
Los agentes habían bajado de las camionetas y ya habían entrado a la casa, la escena los habrá horrorizado.
Estaba segura que subirían todos y me llevarían sin más. Pero no fue así, un joven con cabello castaño subió apuntando con su arma.
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𝐒𝐩𝐞𝐧𝐜𝐞𝐫 𝐑𝐞𝐢𝐝 • 𝐨𝐧𝐞 𝐬𝐡𝐨𝐭𝐬.
Science Fiction"Si se reemplazará la expresión «𝑒𝑙 𝑝𝑟𝑜𝑏𝑙𝑒𝑚𝑎 𝑑𝑒 𝑞𝑢𝑒 𝑠𝑒 𝑒𝑛𝑎𝑚𝑜𝑟𝑎𝑠𝑒𝑛 𝑑𝑒 𝑢𝑛𝑜» por la más literaria de «𝑙𝑎 𝑖𝑛𝑞𝑢𝑖𝑒𝑡𝑢𝑑 𝑑𝑒 𝑠𝑒𝑟 𝑎𝑚𝑎𝑑𝑜», los templos de la melancolía se podrían mantener a salvó." Historias...