One-shot

245 39 9
                                    

"Jefe en pañales" no me pertenece, yo escribo por mera diversión.

Este one-shot está inspirado en la canción "Quién como tú" de Ana Gabriel.

.

.

.

Si alguna vez alguien se detuviera a pensar que era lo que más podía desear tener el gran y exitoso Theodore Lindsey Templeton, nadie vería venir su respuesta.

¿Éxito en cada negociación?, Lindsey no necesitaba desearlo si podía conseguirlo solamente hablando.

¿Más dinero?, para nada, hasta podía decirse que disfrutaba más el proceso de ganarse el dinero que obtenerlo y gastarlo.

Entonces, si no era ninguna de las suposiciones que la mayoría se hace respecto a él, ¿que podía ser aquello que más deseaba?

Pues justo lo que más anhelaba con fervor era algo que el dinero, el poder, los negocios ni ningún otro lujo existente le podían conseguir.

Porque lo que más deseaba no era algo material, sino a una persona.

Tim.

Porque sí, Theodore podía tener su corazón, lo sabía perfectamente, él era dueño de los sentimientos más profundos de Timothy así como este también lo era de los suyos. Sin embargo, y a pesar de eso, no estaban juntos.

Era irónico, tener el amor de la persona más importante de tu vida, de esa persona con la que quieres estar cada día de tu existencia así como también ella, pero no tenerla en sí era un suplicio.

Tenían todo y al mismo tiempo no.

¿De qué servía amarse con cada fibra de su ser si no se podían tener?

Y esa era una respuesta que hasta la fecha era agridulce para el par, puesto que, aunque supieran que amarse les hacía daño, no podían dejar de hacerlo.

Pero a pesar de eso alguien tuvo que actuar y, aunque le rompiera el corazón tener que hacerlo, ese fue Tim.

Rechazarlo, por qué obviamente una relación entre hermanos no era correcta y mucho menos bien vista, era algo que de manera razonable hizo Timothy y eso Theodore lo entendió a la perfección.

No podían estar juntos por miles de razones, era comprensible, pero no por eso significaba que dolía menos.

Porque el corazón de Lindsey dolió cuando Tim terminó con lo suyo, cuando le dejó más que claro que alguien debía de ser sensato y ponerle fin. Usó las palabras correctas, tan meditadas y ensayadas que Theodore no pudo hacer otra cosa más que aceptar, no importándole pensar que tanto tiempo Tim debió de planear aquello mientras seguían juntos, pues su debilidad siempre fue y seguirá siendo él, que si le pedía poner punto final a ese capítulo en su vida, Theo no haría otra cosa más que obedecer.

E ilusamente pensó que podía aceptarlo, pensó que el tiempo se encargaría no de borrar sus sentimientos, sino de hacer que doliera menos, que todo estaría bien mientras Leslie aún formara parte de su vida.

Quiso ser optimista y pensar eso, pero pronto el universo se burló de él y sus intentos por llevar una vida normal, ya que, cuando creyó que empezaba a sobrellevar un poco su ruptura, Tim le dio un duro golpe cuando les presentó a la que sería su esposa.

Carol era la mujer perfecta, nadie podía pedir alguien mejor para Tim, ni siquiera Theodore.

Porque por dentro Theo detestaba lo perfectamente hecha que parecía estar para su hermano: una chica alegre que aceptaba cada excentricidad y rareza suya. Y Lindsey odiaba a más no poder eso.

Él también amaba a Tim, cada uno de sus cabellos desordenados, cada idea disparatada que provenía de él y sus charlas, porque cada pequeña cosa que conformaba a Timothy Leslie Templeton, Theodore las amaba desde antes que cualquiera.

Y no era justo que le hicieran creer que su amor era menos válido que el de ella.

¿Por qué era distinto que ella lo amara?, ¿Qué les hacía creer que ella lo amaba más de lo que él ya lo hacía?

Porque sí Theodore tenía una certeza absoluta era que solo él sacrificaría todo con tal de tener a Tim, no imaginaba a Carol abandonando todo como él haría con tal de demostrar su profundo amor. Si tener que perderlo todo demostraba aunque fuera solo un poco de su absoluta devoción a su hermano, Lindsey lo haría con mucho gusto y sin pensarlo.

No obstante, estaba de manos atadas. Timothy tomó una decisión y Theodore se encargaría de respetarla por mucho que eso lo matara por dentro.

Y mientras pensar en Tim siguiendo su vida sin él oprimía su pecho, imaginar a Carol disfrutando de todo lo que él hacía corroe y llena de la venenosa envidia su alma.

Porque ahora Carol vive todo lo que por derecho le corresponde a él.

El solo pensar como ella disfruta del olor y el calor reconfortante que Tim deja en la cama, tras levantarse para hacer el desayuno después de una noche de amor, lo pone de mal humor. Ella jamás apreciara como él ese perfume, ese que seguramente ahora ella disfruta entre sueños y graba en su mente dichosa. Luego, cuando ella haya decidido que durmió lo suficiente, se levantará para ir a la cocina para encontrarse con él, abrazarlo por la espalda y acomodar su barbilla en el hombro de Timothy, que entre risas la saludará con un "buenos días".

Esos saludos perezosos en la mañana de lo que él tanto disfrutaba sin saber que tendrían un fin.

Así como los dulces y fugaces besos que compartían al despertar, las noches que parecían interminables durante las que hablaban de todo y nada yaciendo abrazados o con las piernas entrelazadas.

Todas y cada una de esas cosas por más pequeñas que fueran, pero que lo eran y siguen siendo todo para Theodore.

Porque, aunque Tim jamás la amará con la misma intensidad con la que lo ama a él, ella podía tenerlo siempre que quisiera, contar con su afecto tanto en privado como en público, porque tendría a Leslie deshaciéndose en amor por ella y haciéndola sentir su todo.

Todo eso que él jamás volverá a tener, y mientras piensa en la suerte de ella que puede tenerle a sus pies, sólo puede ver de lejos como Tim forma la familia con la que siempre soñó.

Y mientras finalmente carga a la pequeña Tabitha, y por mucho que adoró casi de inmediato a la bebé que tanto le recuerda a su amado hermano, Theodore solo puede pensar en la envidia que siempre le acompañara.

Y nada tiene él que esperar aunque se quede en el aire.

.

.

.

Pido perdón por las faltas de ortografía que haya pasado por alto.

Sin nada más que agregar hasta la próxima.

Envidia || Boss Baby fanfic ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora