Derretiste mi corazón agotado y me tomaste en tus brazos Y soy abducido por la calidez de tu abrazo Ahora, para no aburrirme solo Cada vez que me pierda o deambule Te recordaré, ángel de mi vida Ángel de mi vida
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Los dedos en sus manos no le alcanzaban para enumerar las veces en esa semana que habían pasado en su cuarto haciendo el amor.
Ya hasta conocía su cuerpo mejor que el mismo Baekhyun, había logrado observar muchos más lunares de los que podía enumerar en su cara.
Incluso tenía un lindo lunar arriba de su ombligo, en el cual siempre se encargaba de dejar un besito.
Baekhyun sabía a las frutas más dulces en todo su cuerpo, amaba pasar su boca y lengua por todas partes.
Había aprendido todas las cosas que le gustaban y no le gustaban a Baekhyun en ese dulce momento, le gustaba que le besaran el cuello, pero si intentaba morderlo este buscaría como alejarse de su toque. Le gustaba que tuviera sus manos en su cadera, pero no le gustaba cuando las ponía en su cintura.
Como en este momento, tenía a Baekhyun arriba de él, sentía que sólo él podría tener el privilegio de observar de cerca todas las expresiones que hacía, como esa en donde abría toda su boca porque sentía demasiado placer.
El único templo al que el iría siempre y respetaría todas sus reglas, era el cuerpo de Baekhyun.
— Yeollie, estoy cansado— dicho eso se tiró encima de Chanyeol.
— Eres muy mimado, ¿te lo han dicho?
— Uh huh— lo tomó con cuidado y lo puso debajo suyo.
No había dilatado mucho y ambos ya estaban acostados tratando de recuperar su aliento, Baekhyun siempre se terminaba acostando encima de él y le gustaba que le hiciera piojitos.
— ¿Tienes sed?
El castaño asintió sin despegar sus ojos.
— Bien, iré por agua y ya vuelvo.
Baekhyun quedaba entre las sábanas y esa gran cama, le gustaba porque sentía que estaba rodeado por todo el olor de Chanyeol.
Escuchaba un zumbido incesante y luego al voltear a ver por toda la habitación, dió con el celular de Chanyeol, tenía muchos mensajes que no se mostraban en la pantalla bloqueada.
Extraño.
— Bien, aquí está el agua. — le tendió un vaso de agua qué estaba a la mitad, otras veces lo traía lleno.
Baekhyun se quedó viendo el vaso por un gran tiempo y a Chanyeol le pareció raro el comportamiento tan callado de Baek.
