Cuando el bottom se convierte en el top Yandere

Capítulo 29

Hoy, Rudel todavía está merodeando alrededor de nosotros. Tan pronto como salí del aula, sus ojos azules me miraron como si estuvieran esperando. Luego, Rudel se acercó a mí.

"Hail, ¿vamos a almorzar juntos?"

Evan apareció y me tomó del brazo por detrás, justo cuando Rudel se acercaba. Me sentí tenso, temiendo que Rudel mostrara interés en Evan, pero Rudel simplemente giró la cabeza hacia otro lado y se fue, como siempre lo ha hecho últimamente. Su rostro, que solía irradiar una sonrisa brillante, parecía tenso por un momento.

... ¿Qué está pasando?

Luego, algunos estudiantes que seguían a Rudel comenzaron a moverse. Reconocí las caras familiares en medio de ese grupo.

"Esa persona..."

¿No es la que le dio una patada a un balón a Evan la vez pasada?

Miré a otros estudiantes y vi que también estaban cerca de Evan últimamente.

Parece que Evan está siendo herido intencionalmente todos estos días. Esto no es una coincidencia.

En la historia original, Rudel lastimó a Evan a propósito. Si alguien más está lastimando a Evan, probablemente sea por la mano de Rudel. Y si es así, entonces...

Maldito bastardo.

Mi rostro se retorció al instante, junto con la vena que se levantó en mi brazo.

"Hail, ¿Hail?"

Tan pronto como escuché su voz preocupada, mi tensión se disipó entre mis cejas.

"Evan, ve a comer primero".

"¿Y qué pasa contigo, Hail?"

"Tengo algo que hacer por un momento. Ve a comer con Carmen primero, luego te alcanzo".

Le di un suave golpe en el hombro para que se fuera. Evan todavía me llamaba, pero no podía detenerme.

Ya sea Rudel o la trama original, quería proteger a Evan.

Apresuré mis pasos para alcanzar a Rudel antes de que fuera demasiado tarde.

Rudel se dio la vuelta como si supiera que lo estaba siguiendo. Sus ojos azules curvados me hicieron sentir un escalofrío.

"Oh, aquí está Hail".

Pasé junto a un grupo de estudiantes que me miraban con la misma mirada mientras me acercaba a Rudel.

"Podemos hablar un momento".

Rudel no mostró sorpresa al escucharme hablar de esa manera. Parecía que sabía que algo así sucedería tarde o temprano. De una forma u otra, era su culpa que Evan estuviera en peligro.

"Está bien, vamos a hablar en la enfermería".

"Hablemos aquí..."

"Sígueme".

Sus palabras me hicieron sentir un poco mal, pero Rudel siguió adelante como si estuviera a punto de decirme que si no iba a la enfermería, no hablaríamos. Todo lo que pude hacer fue apretar los dientes y seguirlo. Cuando entramos en la enfermería, tuve que contenerme. El olor fuerte a medicinas llenaba la habitación, y me obligaba a fruncir el ceño.

La puerta se cerró, dejándonos solo a mí y a Rudel.

"Parece que Pristin no te seguirá aquí".

".."

"Pero prefiero que vengas tú solo. Siéntate ahí. ¿Quieres beber algo?"

Rudel hablaba con suavidad, pero yo no estaba interesado. No quería estar en un lugar que me hacía sentir tan incómodo. Evan había estado esperándome durante mucho tiempo.