Kaze-Week 2024

Día 7

ADVERTENCIA

EN ESTE CAPÍTULO HAY CONTENIDO SENSIBLE, POR FAVOR LÉELO CON CUIDADO

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- ¡IMPOSIBLE! ¡¿TEMPERATURAS BAJAS?!

- ¿Te importaría bajar la voz? Intento dormir - Bufó somnoliento el estratega - Son las tres de la madrugada, mañana hay clases y a diferencia de ti, tengo examen de química a primera hora.

- ¡¿Qué esperas que haga?! ¡¿Qué duerma mientras mi Felipa pasa frío?! - Refutó alterado el pandillero.

- Pfff - Río Kidou intentando contener su carcajada con la almohada - Me encantaría contarle a los muchachos que el "más rudo" le pone nombre a su florcita.

- ¡Cállate! - Se quejó avergonzado - No te atreverías... ¿Verdad...?

- Por supuesto que no - Respondió tranquilamente viendo al mochiaco acostado en el futón a unos cuantos metros de su propia cama - Eso sería traicionar tu confianza ¿Cómo podría hacerte eso?

- Ufff... Por un momento pensé que de verdad lo harías... ¡Y no es que no confíe en ti! Es solo que si yo fuera tú, me mordería la lengua para poder guardarme el chisme.

- Pensé que no te involucrabas en los asuntos de los demás ¿De aquí en cuando tan extrovertido?

- Supongo que tiene mucho que ver con que nos hayan descubierto... Aunque también debo admitir que me preocupa la situación de Kazemaru.

- ¿Te estás preocupando por Kazemaru? ¡Diablos! Vaya que la jardinería te afectó - Se burló el estratega sin moverse ni un poco.

- ¡No es que él me importe! Quizá sí... ¡Pero ese no es el punto! - Dijo en un susurro muy exaltado - Es solo que... La firmeza con la que Endou dijo las cosas, me deja pensar que las cosas no andan bien entre ellos, tampoco es que me quiera entrometer en su relación, que CLARAMENTE todos sabemos que tienen... ¿En serio pensaban que podrían ocultarlo mucho tiempo?

- Siendo sincero, no lo sospeché hasta que pasó lo de la fiesta, supongo que es porque Kazemaru es muy reservado, nos trata a todos con amabilidad y es un gran compañero... Pero de ahí a suponer que tenía una relación... Pfff... ¿Qué te digo? Es muy surrealista, incluso llegué a pensar que era asexual.

Una gran carcajada estalló en la habitación, pues de cierta forma, no era ningún secreto que el peliazul era "sexualizado" en la escuela, teniendo un séquito de fans que lo admiraban, tanto por sus logros deportivos como sus rasgos delicados, siendo lo que comúnmente se denomina "Un hombre con belleza femenina"

La burla fue interrumpida cuando Kidou le lanzó una almohada con el único fin de hacerlo callar, reclamándole por las burlas y dándole la espalda en señal de querer finalizar la plática madrugadora, susurrando un sarcástico “Buenas noches”

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Aquella noche, Kazemaru se pasó la noche sentado en el sofá del salón de su casa, tomando café y pensando en los cambios que vendrían a raíz de la decisión que tomaría al amanecer, pues su futuro académico y deportivo estaban en juego...

Sus padres jamás le perdonarían que deshonrara a la familia de una manera tan vulgar, seguramente lo desheredarían por el poco pudor que tuvo aquella noche, y aunque intentase explicar que no fue de manera consciente, eso solo empeoraría la reprimenda, ya que como cereza del pastel, había sido descuidado.

Pero... ¿Y su felicidad? ¿Y sus sentimientos? Le parecía demasiado banal que la vida fuese tan solo dinero y apariencias, ya que si de él dependiera, sería el futbolista homosexual más rápido del mundo.