Gusto culposo

Cap 8: 丰

TOM

—Chicos se bajan o los bajo yo! —Ya estaba perdiendo la paciencia—

Era el primer día de los chicos, Leah ni le costó entrar, al pisar la escuela ya se había hecho amigas y los chicos no querían entrar, por un lado me explicaron que era por que no querían problemas, a los chicos los conocen casi toda Alemania por ser nuestros hijos y les entiendo que puedan tener miedo por eso, pero en algún momento tendrán que superar eso y ser fuertes y ese momento ya llego.

—Papá no queremos —Dijo Nick—

—Si no se bajan en los próximos cinco segundos los bajaré yo y les are pasar vergüenza—Dije se miraron entre ellos— Se lo buscaron

Los agarre a los dos poniéndolos en cada hombro.

—No no ya papa! —Pataleaban— Ya ya entraremos solos!

Los baje y ellos se quedaron mirando a la entrando.

—Ya no estén así —Los abrace— Ustedes diviértanse y estén alerta siempre, y si tienen que defenderse háganlo —Ellos asintieron— Ya vallan —Les bese la frente— Los quiero, los vendré a buscar.

Dije y me fui directo al auto, sentía las miradas de varias personas en mi, la verdad es que me importa bien poco, solo quiero que mis hijos estén bien y que no los molestes y si para eso tengo que llevarme a varios por delante lo are sin pensarlo.

VALEN

—Bueno hermanito ya escuchaste a papá, cualquiera cosa, rompemos cabezas —Dije—

—Lo malo es que nos toca en clases diferentes —Dijo Nick—

—Tranquilo nos veremos en el receso y no será siempre que tengamos clases diferentes —Asintió—

—Nos vemos —Le palmee la espalda suave— Cuídate y sabes cualquier cosa me avisas.

Me fui a mi clase según indicaba el mugroso horario que me dieron, la escuela era gigantesca, lo bueno es que el mapa del edifico sabía leerlo.

Llegue a la puerta y la toque, un señor la abrió que cuando me vio abrió los ojos como si hubiera a Visto al mismísimo diablo.

Bueno...que ironía.

—Valentino Kaulitz Trümper ? —Dijo en voz baja—

Eso es algo que mis papás exigieron en la escuela que nadie supiera nuestros nombres, que nos dijeran como todos no conocen.

—Diablo profesor —Lo bueno de ser casi de la estatura de mi papá a los quince años es que a nick y a mi nos miraban con algo de miedo y eso me gustaba—

—D-diablo —me miro de arriba a abajo—pase —Se movió dándome espacio—

Al entrar las miradas se posaron todas sobre mi, algunas chicas empezaron a cuchichear entre ellas y algunos chicos me sonrieron, otros me miraron con cara de miedo y otros simplemente con cara amistosa.

—Bueno jovenes tienen un compañero nuevo, yo creo que ya lo conocen y por razones de seguridad su nombre no lo sabrá nadie, espero se lleven bien con el y que lo integren como uno más. Algo que decir joven? —Me pregunto a mi—