𝔸𝕞𝕠𝕣 ℙ𝕣𝕠𝕙𝕚𝕓𝕚𝕕𝕠 (𝐒𝐨𝐧𝐚𝐝𝐨𝐰/𝐬𝐡𝐚𝐝𝐨𝐧𝐢𝐜)

CAPITULO 1:el cielo y el infierno

Cuando morimos, sabemos que tenemos dos caminos de los cuales podemos escojer de a como fuimos en nuestra vida, sea tanto para bien o para mal.

En el mejor lugar en el que cualquiera le gustaría estar es en el cielo, un lugar muy hermoso, libre, en el cual solo los de buen corazón son aceptados, o alenos la mayoría.

Ese día todos estaban de celebración ya que era el cumpleaños número 3 de el hijo de los gobernantes,sonic the hedgehog, representando la virtud de la humildad  y siguiente a ser el dirigente de todo este lugar.

Su madre, Eleena the hedgehog, estaba muy feliz cargando a su pequeño en brazos y recibiendo todos los regalos que llegaban de todos los angeles del lugar, todo era felicidad, sonrisas, festividad.

Zokar,el padre del pequeño Sonic, solamente pudo estar una hora en la festividad ya que tenía asuntos pendientes, y en especial con los del infierno.

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Y en el peor lugar en el que a nadie le gustaría estar es en el infierno, todo es llamas, quemaduras, maltrato, pero eso es sólo cosa del tiempo, ya que te puedes terminar acostumbrando.

Estaba un pequeño erizo demonio de tan solo 7 años, shadow Doom, representando el pecado capital de la soberbia, y con su mejor amiga y compañera, Rouge the bat, de 6 años, representando el pecado capital de la avaricia.

Ambos demonios jugaban tranquilos hasta que llega el líder del infierno y padre de shadow, black Doom, a llevarse al pequeño para mostrarle algo, asi dejando a la chica sola.

Padre e hijo se encontraban en un lugar alto para poder ver todo el infierno, haci, black Doom romper el silencio que había entre ambos.

—¿ves todo lo que está delante de ti? —señala con su dedo todo el lugar—Todo eso, tú lo gobernaras algún día, y serás el mejor líder que podrá tener el infierno.

El pequeño solo se limitaba a escuchar a su padre con atención, ya que a pesar de ser tan pequeño, entendía muchas cosas que solamente lo entendería alguien de 12 años o más.

El sabia la responsabilidad que era cuidar todo esto ya que años atrás lo construyeron solo para estar lejos de los angeles, pero esa era una duda que tenía el pequeño, ¿que o como eran los angeles? Nunca había tenido la oportunidad de ver uno.
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Todo era felicidad en el cielo, pero cuando acabo toda la festividad el pequeño cumpleañero solo corrió a su habitación y se encerró, su madre al ver tal acto de su hijo se extrañó y subió a hablar con el pequeño.

—sonic, cariño, ¿Pasa algo? ¿Por qué actúas asi?, acaso... ¿No te gusto tu fiesta?.—decia la madre del pequeño desde el otro lado de la puerta, esperando una respuesta del contrario.

—me dijiste que mi padre estaría con nosotros, lo prometiste...y...¿Donde esta?.—decia intentando de contener las lagrimas pero para el era muy complicado, era solo un niño, o al menos era lo que le demostraba a sus padres.

—hijo...lo lamento, enserio, pero tú padre anda un poco atareado, eso es todo, pero al menos pudiste jugar con tus amiguitos, ¿no?

—¿me harías un favor mama?—decía mientras se acercaba a la puerta—¿me llevarías a conocer un demonio?.

La madre solo quedo impactada por lo que el pequeño le pedía, por un lado quería cumplirlo a cambio de que su padre no estuvo en su fiesta, pero por otro lado sabia que eso era muy peligroso, tanto para ella como para el pequeño.

—¿no quieres otra cosa?.—decia intentando cambiarlo de opinión.

—dejame solo.—dijo mientras se acercaba a su cama.

Su madre solamente hizo lo que dijo ya que no quería pelear con el, a pesar de tener solo 3 años, entiende varias cosas, ya que en el mundo Mortal, murió a tan solo los 17 años, por esa razón es un tanto maduro ante varias cosas.

Y claramente no se quedó con los brazos cruzados, cuando escucho a su madre irse, aprovecho la ventana y salió volando de hay, intentando buscas un demonio, era lo único que quería.

Por otro lado Rouge le suplicaba a shadow para que ambos salieran, a ella sí que le gustaba conocer nuevos lugares, y shadow termino convencido y llevado a rastras por su amiga.

En ese momento fue donde un ángel y dos demonios se vieron cara a cara, desde el barranco que los separaba, se quedaron haci por un momento hasta que la albina rompió el silencio saludando al pequeño ángel con la mano, ese solo le regaló una sonrisa, haciéndole entender que le tenía confianza.

—¿Como te llamas?.—pregunta amablemente la albina.

—me llamo Sonic, ¿y ustedes?.— preguntaba viendo de reojo al azabache.

—mi nombre es Rouge, y el es shadow.— decía lo último señalando al nombrado.

Simplemente se quedaron viéndose el uno con los otros, ya que para los tres era algo raro ver a alguien diferente a como acostumbras a ver, pero eso no duró mucho, a lo lejos se escuchaba unos gritos, eran los padres de Sonic buscándolo, al parecer  ya se abrían dado de cuentas que el no estaba en la casa, haci que se apresuró a despedirse de sus nuevos amigos e irse corriendo, ya que si lo veían en ese lugar sabrán que fue a buscar un demonio y estaría castigado por meses.

Ambos demonios se miraron entre sí y decidieron también volver por qué si los veían hay eran capaces de asta lanzarlos a la lava... El castigo mayor...

Continuara...