Capítulo 12

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Narra Hyunjin

Todo era un maldito caos en la sala, Chan encima del Señor Jeung, madre y la Señora Jeung intentando separarlos ¿Pero que había pasado? Cuando Jome y yo subimos a la habitación, estaba todo tranquilo, corrí hacia donde Chan tomándolo con fuerza de los brazos separándolo del Señor Jeung con la ayuda de mis hermanos, quienes ya habían regresado de dar su tour por toda la casa.

Hyunjin: ¡Detente Chan, detente!

Chan: ¡Maldito bastardo! ¡¿Quién te crees que eres para hablar de esa manera de mis padres?!

Madre: Hijo por favor cálmate

Hyunjin: ¿Que fue lo que dijo este señor Chan?

Sr. Jeung: Le dije la verdad, que tú padre era un muerto de hambre, un bueno para nada que le gustaba las cosas fáciles, que por esa razón se quedó con tú mamá

Sra. Jeung: Nunca pensé, nunca pensé que te atreverías hablar de esa forma de una mujer, este no es el hombre con el que me case

Chan: Para que vaya viendo señora Jeung, su esposo no es más que un farsante, es una igual que una moneda, tiene dos cara, una que muestra frente a la cámara, y luego está está, que es la verdad

Me mantuve durante el tiempo en el Chan hablaba, observando de manera detallada al señor, que por desgracia, me engendró, lo observé a tal punto que la rabia y odio que siento hacia el, se hacía más y más grande, observé a mi madre, quién estaba al lado de Chan junto a Serena, quién a la vez se encontraba frente a Chan, como escudo para el, mi vista se movió hacia la señora Jeung, quién lo observa en silencio, pero en su mirada había tantas emociones, miedo, asco, odio, pero sobre todo decepción, decepción de ver al hombre con el cuál ella se casó, decepción del hombre del cuál ell se enamoró, luego paso a sus primas y demás hermanas de las chicas quienes veían la escena asustadas y a la vez sorprendidas por todo lo que estaba ocurriendo, y finalmente mi vista cayó en Jomeiris, ese hermoso brillo en sus ojos no estaban, o bueno si, pero por causa de las lágrimas, sus labios temblaban, y las lágrimas bajaron de manera lenta por sus mejillas, o no, eso sí que no, arrugue mi entrecejo regresando la vista al Señor Jeung, quien ya se encontraba sentado en el sofá.

Hyunjin: Miré a su alrededor señor Jeung, usted mismo está destruyendo a su familia, y mire que solo ha pasado un día y medio, ni siquiera oscurece, y ya consiguió que dos de sus hijas lloraran, sus sobrinas estan más que asustadas, que decir de Serena y Jomeiris, no bueno, y ni hablar de su esposa, miré a su alrededor, mire todo lo que ha causado en menos de cuarenta y ocho horas

Sr. Jeung: Cállate

Hyunjin: No, no me voy a callar, si en menos de cuarenta y ocho, usted consiguió poner a su familia en este estado, y simplemente por nuestro matrimonio, no quiero saber que pasará si sus otras hijas de casan con otros hombres que no sean los que usted eligió para ellas, contando a sus sobrinas

Sr. Jeung: Que te calles he dicho

Hyunjin: Lo que no entiendo es el por qué se de esa manera, ni que sus hijas se hubiesen casado con unos viejos asquerosos, aunque estoy seguro, que hasta eso hubiera preferido

Sr. Jeung: ¡QUE TE CALLES MALDITA SEA, QUE TE CALLES!

Hyunjin: ¿O será por qué somos hijo de mi padre? ¿Es por eso cierto?

Se colocó de pie dispuesto a pegarme, pero Jome se interpuso entre los dos quedando en el medio, haciendo que este detuviese su andar hacia mi persona, su vista paso de Jome, hacia mi y viceversa por varios segundos, y eso, en lugar de calmarlo, lo hizo enojar por mucho de lo que ya estaba.

Narra Chan

Viejo mal parido, bastardo, hijo de puta, como lo odio a más no poder, como quisiera matarlo en estos momentos con mis propias manos, pero no, no lo haré, haré que el mismo se mate si es necesario, yo no me pienso ensuciar las manos, juro por la memoria de mi padre, que mandaré al cementerio a ese señor, o dejo de llamarme Christopher Bang, mal nacido, doble cara, traicionero. Mientras Hyunjin hablaba, yo trataba de calmar estás ganas tremendas que tenía de matarlo ahora mismo, Serena tomaba mi mano tratando de calmarme, mientras se encontraba frente a mi en forma de escudo, por unos minutos me di la pequeña tarea de observar a mi alrededor después de las palabras de Hyunjin, y que razón tenía, sus hijas y primas estaban más que asustadas con la situación, la Señora Jeung y mi madre estaban que la pinchaban y no votaban sangre ¿Y Sere y Jome? Nada más mirarla a los ojos sabía lo dolida que estaban con esta situación ¿Y cómo no? Si su propio padre, al que siempre conocieron como el hombre perfecto, el más respetado, cariñoso, tierno, etc, resulto ser todo lo contrario a lo ellas acostumbraban a ver, el grito del señor Jeung me trajo a la realidad haciendo que arrugase mi entrecejo, quería hablar, pero sabía que siquiera decia una palabra, habría otro problema, por lo que me preferí quedarme callado, y salir de esa casa.

Salí hecho una fiera de ese lugar, sabía que de ahora en adelante iba hacer donde viviríamos, pero tampoco estaba seguro de si iba a poder soportar vivir bajo el mismo techo que ese señor, no sabía si iba hacer capaz, de controlarme y no tirarlo por las escaleras, y mandarlo derechito al hospital. Peine con desesperación mi cabello hacia atrás, apretando con fuerza mi mandíbula pateando en el proceso dos tarros con flores rompiendo estos al darle las patadas.

Chan: ¡Mierda! Controlate Chris, controlate o las va terminar matando

Sere: Si, será mejor que te controles

Chan: Mantente alejada Serena, por favor

Sere: Debes de regresar a todos tus sentidos Christopher, o en lugar de destruir a mi padre, te vas a terminar destruyendo a ti mismo, debes de calmarte

No le respondí, la escuché si, pero no le respondí, preferiría esperar a que mi enojo pasase, a responderle o decirle algo, porque sabía que si le respondía estando de la manera que estoy, todo este matrimonio se iría a la misma mierda, desde el principio. Suspiré acercándome a ella tomando su rostro en mis manos besando suavemente su frente, acariciando su mejilla tratando de sonreírle.

Chan: Regresa a dentro de la casa, quiero estar solo y pensar...

Venganza • STRAY KIDSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora