Era un tiempo de cambios... Muchos cambios.
Era la primera vez que me iba a otro país, lejos de mi familia y de mi amada Patria.
Amaba Argentina, pero necesitaba un cambio de aires.
Y un lugar seguro para vivir.
Últimamente la seguridad no era muy buena en mi querida tierra natal. Las ciudades eran azotadas por los robos, la miseria y el desempleo. Y cada día, la inseguridad crecía más y a pasos agigantados. Ya no era un lugar seguro para mi, una jovencita de quien muchos cuidaban.
Tenía muchos amigos en mi querida Argentina que me cuidaban, y cada noche, los fines de semana, nos ibamos a algun bar a pasar el rato de forma tranquila y sin molestar. Ellos no tenían mi edad, al contrario, me la doblaban y podría decirse que yo no me quejaba por ello. Siempre que salíamos me cuidaban, era la más joven de entre todas las mujeres del grupo y trataban de no perderme de vista.
Una mujer sola era presa fácil. No importa que tan cuidadosa sea.
Si, lo se... Es raro que una adolescente, casi adulta, se junte con gente casada, con hijos y con más de 15 años más que ella. Pero no me quejo, jamás fueron gente irrespetuosa y siempre tuve una buena imagen de ellos. Eran personas a las que la sociedad había tachado como "Peligrosos" cuando los verdaderos peligrosos eran los que salían a robar en vez de salir a trabajar.
Era enorme el cariño que les tenía ya que, desde los 14-15 años, siempre me han cuidado y me han educado como si yo fuese su hija. Grandes lecciones y verdades me han enseñado y siempre voy a valorar eso.
A pesar de tener 19 años, prefería estar en algún bar disfrutando de una limonada por las noches, antes que estar en alguna discoteca con mucho ruido y gente... Bueno... No tan agradable.
Tenía un alma vieja y me alegraba por ser así. Antes no me gustaba, pero lo agradecia en el presente porque jamás hice algo que no debiera y siempre estuve bajo la supervisión de personas que no tenían mi sangre, pero en el fondo de mi corazón los consideraba mi familia, me enseñaron muchas cosas buenas, valores y lecciones valiosas que nunca olvidaré.
En fin, demasiados recuerdos dorados, volvamos al principio de todo...
Me fui a vivir a la ciudad de Shanghai, ubicada en China, con la esperanza de poder tener un lugar seguro donde establecerme, además de poder seguir con mis estudios y conseguir un buen trabajo.
Hace unos 2 meses atrás, durante mis últimas vacaciones de secundaria, en Enero y Febrero, una compañía vio mi trabajo como programadora. Resulta que un amigo mío, que trabaja como Programador Profesional, recomendó mi trabajo a una empresa de videojuegos y le dijeron que me contactarían si llegaban a necesitar personal extra. Al final, terminaron llamándome.
Obviamente fue una oportunidad única para mi.
Tenía mi título del Secundario completo y mi título como Ilustradora en la escuela de Arte, además de mi certificado en programación que había hecho por 2 años en un curso. No tenía para pagarme la carrera de Programación porque estaba terminando la secundaria y no tenía trabajo. Así que opte por un curso, en el cual aprendí lo básico y lo más importante.
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Nuestros raros corazones... Nos hicieron coincidir...~ (Wriothesley x Lectora)
FanficEsta historia se basa en la vida de Celeste, una chica Argentina que se muda a China, en la ciudad de Shanghái para ser mas exactos. Celeste se muda a China porque ya no le quedaba nada en su país de origen, sus padres se habían divorciado y sus 3...