Un último recuerdo

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Zenitsu —. Aniki quiero hacer algo —.

Llegó emocionado corriendo el pequeño niño frente a su hermano mayor. Kaigaku lo miró aparentemente desinteresado y luego le regalo una sonrisita.

Kaigaku —. ¿Qué quieres hacer? Si de nuevo me pedirás que te lleve al cielo para que puedas saber el sabor de las nubes no cuentes conmigo —.

Zenitsu —. No. Ya estoy muy grande para eso. Quiero que me enseñes a bailar —.

Los ojitos del niño de 5 años se iluminaron mucho más que su sonrisa al pensar en la idea de aprender a bailar con su hermano mayor. El joven de 12 lo vió con extrañeza.

Kaigaku —. ¿Cómo sabes qué es bailar? ¿Y por qué quieres que yo te enseñe? —.

Zenitsu —. El abuelito me dijo que cuando era joven era muy feliz cuando bailaba y que lo hacía tan bien que enamoraba a toda doncella con la que bailaba, y me dijo que ya no podía hacerlo por su piernita de palo, pero que si yo quería aprender te pidiera a ti que me enseñaras porque tú también eres un gran bailarín y lo harías sin dudar —.

Zenitsu destilaba admiración en cada pequeño y gran gesto que tenía, parecía una estrellita. El mayor lo miro entre anonadado y nervioso ¿Cómo iba a explicar ahora que no sabía bailar y fue que le dijo una mentira al abuelo para zafarse de un aprieto? ¿Esta era la venganza del abuelo que sabía que era más tieso que un muerto pero nunca le había dicho nada por eso?

Pero ahora lo más importante ¿Cómo le decía que no a esa carita?

Kaigaku —. En realidad no soy... Tan bueno bailando —.

Tenía una gotita de sudor al lado de la frente, pero Zenitsu en vez de desanimarse empezó a dar saltitos.

Zenitsu —. No importa ¡Enséñame!¡Enséñame!¡Enséñame! —.

Kaigaku —. Pero no se verá bonito —.

Zenitsu —. No importa, si me enseñas a bailar un poquito seré muy feliz ¡Y haré que el abuelo baile conmigo y también bailare contigo!

... Seamos sinceros, claro que Kaigaku no puede decirle que no.

Kaigaku —. Esta bien... Dame las manitos —.

↭ • ✰ • ↭

Zenitsu —.Kaigaku... Kaigaku —.

Kaigaku —. Ay... ¿Qué paso...? —.

Zenitsu —. Te quedaste dormido mientras leíamos una de las mejores historias de romance de Kinoto Inatso —.

Kaigaku — ... Ya entiendo porque me dormí... —.

Zenitsu —. ¡Kaigaku! —.

Kaigaku —. Ya no seas chiton... ¿Por qué me llamas por mi nombre? —.

Zenitsu —. Estoy molesto contigo. Primero no me dejas ver al abuelo, y ahora te duermes con una de mis lecturas favoritas —.

Kaigaku —. No me dormí bobo. Solo me distraje recordando la finca —.

Respondió simple, Zenitsu respiro hondo antes de preguntar algo que lo carcomía desde hace meses.

Zenitsu — ... Aniki... ¿Por qué de repente ya no quieres que sea cazador? —.

Kaigaku —. Ya te lo dije Zen, no quiero que mueras pronto. Además hay que pasar tiempo juntos —.

Zenitsu —. Pero eso te lo decía yo antes y no te importaba ¿Y por qué no pasar tiempo con el abuelo? —.

Kaigaku —. *Suspiro irritado* ¿En serio me vas a obligar a decirte? ¿Hoy? —.

Zenitsu —. Si, en serio quiero saber —.

Kaigaku —. El abuelo murió —.

Dijo seco, desviando la mirada del chico que lo veía incrédulo. Los ojos de Zenitsu se llenaron de lágrimas y comenzó a llorar con fuerza.

Kaigaku solo se acercó para abrazarlo.

Tranquilo Zen, te prometo que toda la raza humana morirá antes de que yo permita que algo te pase.

No llegue a tiempo con el abuelo, pero tú no te podrás separar de mi nunca.

Pensó de manera posesiva y celosa mientras acariciaba el cabello rubio.

Zenitsu no tiene idea del psicópata que es su hermano mayor. Y Kaigaku prefiere que muera antes de saberlo.

↭ • ✰ • ↭

Zenitsu —. Aniki, tengo sueño —.

Kaigaku —. ¿Cómo no? Has estado todo el día bailando, corriendo y saltando. Ya duérmete —.

Le habló con tono juguetón mientras lo arropaba, el pequeño bostezo y enseguida se durmió.

Kaigaku lo miro con ternura antes de levantarse e ir a ver al abuelo. Él también estaba dormido así que no se preocupó.

Tomó su katana y fue al sembradío encontrando a otros varios alumnos de Jigoro guindados de un árbol. Les había tendido una trampa a todos aquellos groseros con su maestro o maltratadores con Zenitsu y ahora los tenía ahí atrapados en la red.

Fue complicado mantener al abuelo y a Zenitsu lejos de ellos pero lo había logrado, lo que más le preocupaba del plan era el sensible oído de su hermanito, pero él ya estaba acostado, cansado por el día tan divertido que tuvo con su aniki, tanto que no podrá escuchar los gritos de esas personas.

Ellos dos eran lo único importante en su vida, los únicos con quienes no sería su verdadero yo. Sería un buen aniki para el niño que a pesar de todos los tratos malos de su parte lo quería, y para Jigoro, que a pesar de las malas actitudes y tratos groseros lo educo con cariño, sería un gran alumno y un gran nieto.

Pero hoy para esos idiotas sería la muerte la desgracia y el sufrimiento.

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Vamos a superar los tres caps >:D

Ya solo nos quedan dos capítulos como mucho tres, ya veré.

No sé ustedes pero me encanta y odio a Kaigaku psicópata y quería hacerlo. Pero está vez tendré el final que yo quería.

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⏰ Última actualización: Mar 27 ⏰

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Mi querido hermanitoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora