Líderes

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Carla

Hoy día iba a ser el entierro de Luzma, mi papá junto con Rutila habían organizado todo

Anaba en una de las terrazas esperando el momento para enterrar a Luzma, el campo me hacia acordar a mi niñez, cuando vivía con mi mellizo

X-Veo que aun te gusta apreciar las vistas que tienes a tu alrededor, gatita

Había una única persona que me decía así y al voltear no podía creer que estaba ahí.

La Felina Eunice estaba parada junto a mi, aquella mujer se había convertido en una consejera para mi y un tiempo creía que estaba muerta, porque no había ninguna pista sobre ella

Corrí abrazarla

Carla-Por Dios, ¿Cómo estas viva?

Felina-Una gata como yo tiene siete vidas mi reina

Carla-Pues ya te quedan seis Eunice; enserio no puedo creer que estés aquí a mi lado

Felina-Son sorpresas de la vida princesa. Volví aquí para hacer negocios y te voy asegurando que es muy grande, pero lo primero es que vos mi reina me ayudes

Carla-¿Para qué te voy hacer útil? Porque la última vez que te ayude fue hace mucho tiempo ya

Felina-Y salió todo muy bien, hasta te enrollaste con el hijo de la zorra de Nonín para sacar información

Carla-No me lo folle Felina, tan solo hice lo que estaba a mi alcance. Yo no necesito revolcarme con alguien para conseguir lo que quiero

Felina-La inteligencia de tu tío Chacorta heredaste

Algún día tu, vas a ser muy grande y créeme que yo, tu tío Chacorta, va a estar muy orgulloso de ti hadita

Carla-¿Cual es la ayuda que te puedo brindar?

Felina-Necesito que vengas conmigo a Colombia

Carla-Tu sabes que ese país yo no lo puedo pisar

Felina-Pues es hora de en enfrentar ese miedo tan grande que le tenéis a mi tierra

Carla-Tratare de mostrar mi mejor cara, pero no te prometo

Felina-Bueno ya, eso lo hablaremos más adelante, ahora si vamos a darle el último adiós a tu hermana

Después de darle el último adiós a Luzma, nos reunimos todos para hablar sobre el negocio, pero aquello no le presté atención tanto

Laura-¿No vas a contestar? Mira que puede ser algo importante

Carla-Lo dudo, aparte estamos con este negocio ¿no?

La llamada dejó de sonar para así poder concentrarme en lo que me había pedido anotar Rutila, pero en menos de pocos segundo mi celular volvió a sonar

Diana-Por lo menos fíjate quien es, capaz sea Ismael o el Greñas, que de aseguro necesitan algo

Era Leonardo

Rutila-¿Quien te llama tanto?

Carla-Una x persona, nada de importancia

Rutila-Bueno como les decía—volvió a sonar mi teléfono—¡Carla quieres contestar el maldito teléfono!

Carla-¡Ya esta bien! ¡No grites!

Conteste el celular para que así Rutila no se queje tanto

Leonardo-Hola rubia, ¿Podes hablar ahora?

Carla-¿Qué pasa? Porque tanta intensidad al llamar

Leonardo-Sabes que tenemos que arreglar las cosas