Camille, una mujer astuta y determinada, se encuentra atrapada en una trama retorcida que parece sacada de una telenovela. Convencida de ser la villana de "Herencias de Secretos", una telenovela que obsesivamente vio en su vida pasada, Camille se ve...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El sueño comenzaba siempre igual:
Yo camino lentamente por un corto pasillo desconocido, llevando cuidadosamente dos tazas humeantes, hasta llegar a un living con un gran sofá, la anciana sentada en este me mira con una cálida sonrisa y recibe la bebida con un agradecimiento, tiene una expresión tan dulce.
La señora apunta muy alegre hacia la televisión y comienza a relatar todo lo que me perdí. No creo haber tardado más de cinco minutos, pero, por su resumen, parece que han sucedido muchas cosas mientras no estaba.
Es extraño, porque nunca he visto una telenovela en mi vida, pero recuerdo la trama de esa muy claramente...
"Herencia de Secretos", es protagonizada por Elena Herrera, quien consigue un trabajo en la editorial Costa-Montenegro, donde se reencuentra de Daniel Costa, hijo del dueño, y a pesar de que él está comprometido con Camille Montenegro, Elena se enamora perdidamente de él.
Luego, se descubre que José Montenegro, el padre de Camille, es el padre biológico de Elena. Camille y su madre intentan destruir a Elena, incluso matarla, pero son atrapadas. Camille muere en un accidente de auto mientras huía de la justicia.
Mientras tanto, el amor entre Elena y Daniel solo se fortalece a medida que superan juntos todos los obstáculos que se interponen en su camino. Finalmente, la pareja se casa, uniendo a las dos familias en una celebración de amor y reconciliación, cerrando así el capítulo más oscuro de sus vidas y abriendo paso a un nuevo comienzo lleno de esperanza y felicidad, y bla bla...
Mi mayor problema con esto es que... ¡¡¡Yo soy Camille Montenegro!!!
Mi terapeuta dice que, tal vez, este sueño es un reflejo del miedo que tengo de convertirme en mi madre.
─Señorita ¿Se encuentra bien? ─ Preguntó la mujer de mediana edad en el asiento del conductor, mirándome por el retrovisor cuando había frenado en un semáforo.
─Sí, Greta, gracias. ─ Le sonreí forzadamente para no preocuparla. ─Es que ahora serían como las 3 A.M. en París, y no pude dormir en el avión.
─¿Está segura que no prefiere ir a su departamento a dormir? Fue un vuelo largo.
─No, mi madre dijo que era urgente. ─ Asintió con una mirada triste, ella sabía perfectamente que si mi madre me ordenaba algo, yo lo debía cumplir. ─Por cierto, traje los mismos macarons de la otra vez para tu familia.
A lo largo de mi vida, Greta ha sido unas de las figuras más presentes en mi día a día. Fue asignada como mi guarda espaldas cuando yo tenía 11 años, y hasta que me independicé, era con quien más tiempo pasaba, ella y sus hijos son como de mi familia.
─Muchas gracias, Isa y Emma se emocionarán mucho.
─¿Cómo ha estado Emma? Isa me dijo que le va muy bien en la escuela.
