𝐿𝒶 𝐸𝓂𝓅𝑒𝓇𝒶𝓉𝓇𝒾𝓏 𝒜𝓏𝓊𝓁

𝑪𝒂𝒑í𝒕𝒖𝒍𝒐 4: 𝑳𝒍𝒖𝒗𝒊𝒂 (𝒏𝒔𝒊𝒔)

A Yoichi siempre le gustó la lluvia.

Quizás uno de sus pasatiempos favoritos en aquella época era leer mientras escuchaba el sonido de las gotas de lluvia cayendo sobre la superficie.

Fue agradable y relajante.

Lee un libro que explora las emociones humanas y sus temas más sensibles y problemáticos estando solo en su habitación, sin la presencia de nadie, excepto de su gata, Ame, una gata negra con ojos azules como su dueño, cuyo nombre significa literalmente lluvia, mientras escuchando el relajante sonido de la lluvia.

Durante mucho tiempo fue el pasatiempo favorito de los mestizos.

Su padre, Noel, le pidió que intentara hacer amigos para no quedarse solo.

Pero Yoichi no se sentía preparado para ello, no creía que realmente pudiera encajar con nadie a su alrededor.

Las únicas personas con las que pudo entablar una amistad fueron Alexis y Michael, pero aún así prefería quedarse en casa leyendo en lugar de pasar tiempo o hablar con esos dos.

El joven se sintió incomprendido, que sus libros eran lo único capaz de comprenderlo. 

Esos sentimientos complicados y de soledad que sentía desde niño. 

No creía que ninguno de sus amigos lo entendería alguna vez, no, no lo creía.

Tal vez simplemente finjan entenderlo o algo así, pero nunca lo entenderán.

Puede que sea un libro obsesivo a los ojos de todos, pero no importaba. 

Ese montón de papeles unidos era su mundo, su zona de confort.

Michael y Alexis son buenos amigos, pero Yoichi tiene miedo de que se acerquen demasiado y él mismo destruya la amistad, por lo que siempre se mantiene a raya. 

Todo porque le cuesta confiar en sí mismo, por miedo a que otros le hagan daño o le provoquen la autodestrucción.

Ese miedo constante le hizo refugiarse en sus lecturas bajo la lluvia..

Yoichi no sabría explicar cómo dejó de pasar tanto tiempo en casa para empezar a pasarlo con sus amigos.

Ni siquiera él sabe cómo terminó así.

Pero se podría decir que esto fue gracias a Alexis.

El alemán de cabello magenta, al enterarse de lo que Yoichi estaba haciendo, no intentó convencerlo de que dejara ese hábito. 

Si no, decidió leer con él mientras escuchaban el tranquilizador sonido de la lluvia.

Alexis le recomendó y le regaló libros que trataban de psicología humana, ciencia y más de ese tipo de temas, lo cual por supuesto, fue una gran y útil recomendación.

Sin darse cuenta, ya era una costumbre de ambos que cada vez que llovía o Yoichi estaba triste, Alexis envolvía al menor en un cálido abrazo mientras leía uno de sus libros de arte y de vez en cuando acariciar el cabello del mestizo, quien se encontraría sentado en el regazo del mayor, con su cabeza usando el pecho del mayor como su almohada humana mientras leía algún libro que este le recomendaba

.Y Ame estaría allí, maullando en el regazo de su dueña, mientras ella dormía plácidamente, escuchando ese sonido de las gotas de agua cayendo.

Fue realmente reconfortante para Yoichi que realmente le gustara esta nueva forma de pasar su pasatiempo.

Gracias al alemán, el mestizo se sintió más cómodo.

Y eso también hizo que Yoichi comenzara a salir más de casa.

Al principio salió a comprar libros con Alexis y terminó saliendo con todo el grupo de Michael y Alexis.

Y no podía negarlo, era divertido pasar el rato con ellos, no se arrepentía en absoluto de haber empezado a salir más.

Antes le gustaba la lluvia porque le recordaba cada vez que su madre le leía cuentos sobre ella mientras le susurraba que no debía tenerle miedo a la lluvia, aunque eso le causaba un recuerdo muy triste por lo que le pasó. 

Por eso siempre leía libros que tocaran temas sensibles o tristes, ya que terminaba asociando la lluvia con algo triste.

Aunque ahora, después de empezar a leer con Alexis mientras llovía, dejó de asociar la lluvia con algo deprimido. 

Comenzó a asociarlo con algo tranquilo que le transmitía paz y amor, debido a las lecturas que solía hacer con su madre y las que ahora hace con Alexis.

Ahora le gusta la lluvia por todos los recuerdos nostálgicos que tenía con su amada madre y hasta el día de hoy espera pacientemente que ella se recupere para poder retomar ese hábito con ella.

Pero claramente no significa que con eso vaya a dejar su hábito con Alexis, está más que claro que seguirá leyendo con él.

"Gracias Alexis, ahora la lluvia tiene un nuevo significado para mí, y mucho mejor que el que tenía antes".

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