𝗗𝗘𝗟𝗧𝗔 | FRANCISCO X ESTEBAN

𝟎𝟔 - 𝐌𝐀𝐑𝐂𝐀

Al salir de la ducha, Fran todavía seguía en la misma posición, lo que hizo que Esteban rodara los ojos.

Se cambió sin vergüenza, ya que parecía que el omega no tenía ganas de asomarse.

Aunque la realidad fue otra.

Fran apenas había asomado sus ojos tras la sábanas, viendo a Esteban de espaldas a él.

Y de nuevo, aunque esta vez un poco mejor, pudo ver la marca en el cuello de Esteban, confirmando lo que había creído ver el día anterior.

Rápidamente volvió a esconderse tras las sábanas.
Sintió un poco de pena por el chico, pero más que nada, se sintió algo confundido.

Esteban parecía otro alfa para él, bueno, no otro alfa, sino su alfa.

Podía sentir su olor, e incluso, por más que el otro no se diera cuenta, tenía actitudes de alfa con él.

Recordó la conversación que habían tenido la noche anterior, cuando él había regresado a su forma humana para confusión de Esteban.

Es ese momento Fran pensó que el chico sólo se estaba comportando como un idiota (cosa que no quitaba que él lo fuera realmente), pero ahora que confirmaba que a su alfa lo habían mordido entendía un poco más la actitud.

¿Debería preguntarle qué había pasado? ¿Cómo fué que la habían hecho? ¿Quién?

Aunque tenía más que claro que Esteban lo mandaría a la mierda.

Debía esperar un poco más.

─ Eh─ un ligero golpe en su espalda hizo que se moviera para asomar sus ojos sobre la sábana, para ver a Esteban ─ , la comida está lista. Cociné para los dos, no me hagas desperdiciarla.─

Sin decir nada se fué hacia la cocina, y sin contestar, Fran lo siguió segundos después.

Se sentó enfrentado a Esteban en la mesa, con su plato ya servido, tomó los utensilios y antes de empezar a comer murmuró un "Gracias" mirando al castaño.

Pero en cuanto los ojos del otro se encontraron con los suyos bajó la vista y llenó su boca con la comida.

Pasaron unos minutos donde no dijeron nada, hasta que Esteban casi había terminado su plato, pero estaba lo bastante satisfecho como para comer más lento e intentar hablar con el omega.

─ ¿Vas a contarme qué te estaba pasando cuando llegué?─
Fran lo miró unos segundos, Esteban no apartó sus ojos de él.

─ ¿Estabas sensible? ─aventuró Esteban.

─ Sí, supongo─ dijo Fran, bajo.

"Este no sabe tratar a un omega" pensó.

Esteban sólo asintió, terminó lo que quedaba en su plato en dos bocados, juntó los utensilios sobre el plato vacío y se levantó para dejarlo en el lavado.

─ Debes tomar los supresores─ dijo, voltendose para apoyarse sobre la barra de la cocina.

Vió al omega fruncir el ceño y mirarlo con enojo, aunque cambió su expresión rápidamente y continuó comiendo su comida.

─No te gusta que te den órdenes─ dijo Esteban.

─ No es de mis cosas favoritas─ respondió.
Esteban asintió, Fran no dijo nada, terminó su plato y volvió a agradecer a Esteban por la comida.

Se sobresaltó un poco cuando sintió la mano del chico en su hombro, alzando la vista hacia el rostro de Esteban.

─ No tienes que ser distante conmigo sólo porque estás sensible.─