SNOWMAN [Todoroki Shoto]

"11"

Tenko

Bakugo volaba junto a Kirishima mientras cargaba a Hiro en sus brazos.

La chica no había dejado de murmurar ruegos por todo el camino y tener espasmos como si estuviera dentro de una pesadilla de la cual era imposible despertar.

Katsuki estaba preocupado por ella, pero la situación lo sobrepasaba y no le dejaba pensar en una solución.

Lo único que podía hacer era volver con el resto e intentar llevarla a un lugar seguro para luego volver al ataque contra los villanos.

- Aguanta solo un poco... - susurró para que solo ella pudiera escucharlo, aunque era lógico que la chica era incapaz.

Su frente estaba cubierta por una capa de sudor frío y su ceño estaba fruncido profundamente.

Hiro no despertaría, no importaba cuanto la llamaran.

Como para asegurarlo, los grilletes dejaron crepitar su energía maligna con más intensidad.

Hiro ocultó sin darse cuenta su rostro en el pecho de Bakugo como si buscara esconderse de lo que sea que estuviera viendo.

Katsuki apretó los labios e intentó apresurarse más, aunque eso resultara casi imposible.

Fue entonces cuando algo los detuvo.

- ¡Hiro! - repentinamente, una persona apareció frente a ellos haciendo que detuvieran su carrera.

Bakugo miró atónito a un chico de cabello bicolor que observaba con desesperación a la persona entre sus brazos.

¿Qué diablos hacía Todoroki allí?

Cuando aterrizaron en el suelo, Todoroki se precipitó hacia él.

- ¿Qué pasa? ¿Por qué está así? ¿Qué ocurrió?

Kirishima estaba algo desorientado.

No podía creer que Todoroki Shoto, el chico que parecía igual de frío que su particularidad, parecía sinceramente preocupado al borde de la demencia.

Por otra parte, Bakugo lo miraba no con muy buenos ojos.

- Aléjate, mitad-mitad. Estorbas - chocó su hombro con el del contrario de malas maneras pero esto solo hizo que Shoto se enfureciera.

- ¿Qué le pasa? - esta vez, si se lo preguntó directamente mirándolo con llamas en sus ojos.

Claro, Katsuki no se asustó por su enfado y hasta se río de él con sarcasmo.

- ¿Ahora te preocupa? Eres un hipócrita.

- ¿Qué quieres decir?

- Vamos, chicos. No es momento para esto - Kirishima se colocó entre los dos sintiendo como esto podría estallar en una sangrienta pelea en cualquier momento.

Katsuki resopló pero no dijo nada más, ahora la condición de Hiro era más importante.

Shoto se dio cuenta con el entrecejo fruncido de la presencia de un par de grilletes en las muñecas de la chica.

- ¿Por qué todavía tiene esto puesto?

- Cuando la encontramos, lo intentamos pero fue imposible quitárselos - Eijiro decidió ser quien intercambiará palabras con Todoroki porque estaba seguro de que si le dejaba esa tarea a Bakugo esto iba a terminar muy mal.

- ¿Qué? - Shoto exclamó lleno de confusión.

Por impulso, llevó sus manos hacia los grilletes con intenciones de congelar los y así poder romperlos fácilmente, pero en cuanto estuvo a punto de tocarlos, una corriente eléctrica de color púrpura lo atacó de imprevisto obligándolo a retroceder.