2010, Brasil, Río
Sofia
-Era de noche, estaba en mi auto, negro y lujoso, es realmente hermoso mi auto, mi hermana y mi auto, son lo mejor que me a pasado en la vida. Con una enorme velocidad increíble que nadie vio en su vida. Obvio que tenía permiso para andar con esa velocidad, me estaba yendo al aeropuerto. Iba abuscar a mi hermosa y linda melliza, Naty. Hace más de tres años que no nos veíamos, ella estaba volviendo de su "trabajo". Pasaron prácticamente dos horas y llegué al aeropuerto, baje de mi auto, la estuve esperando máximo dos minutos y ahí la veo, tan hermosa como la última vez que la vi-
Ya era hora -dije seria-
Y bueno nena, ¿que queres que haga? -dijo sarcástica-
Y nada estúpida -dije molesta- ¿En donde carajos estabas? ¿Por qué mierda tardaste tanto? -dije molesta. Empecé apretar mis puños-
El viaje fue peligroso, habían tormentas y relámpagos -dijo seria-
Como sea, ya vamonos -dije seria. Me di la vuelta y me subí a mi auto-
-Espere que suba al auto, tardo unos segundos y subió, directamente. No tenemos una buena relación de hermanas que digamos, aunque yo soy mayor por cinco minutos. Yo haría cualquier cosa por protegerla, ella es lo único que me quedo de mis padres, ella es mi pequeña hermana menor por cinco minutos. Pero es mi adoración, cuando subió al auto, arranque rápido, ya que tenia demasiado trabajo y además que hoy era mi aniversario con mi maldito y estúpido esposo.-
Natacha
-Cuando había subido al auto, mi hermana ni capaz de dejarme ponerme el cinturón de seguridad, arranco realmente rápido. La mire, se veía furiosa y parece que se enojo con su esposo, porque si estaría enojada conmigo, estaría justamente ahora diciéndome un montón de cosas-
¿Que te pasa? -dije con curiosidad. Me daba demasiada curiosidad saber que es lo que le pasaba a mi hermana-
Es...complicado hermanita -dijo Sofia, sin mirarme a los ojos-
Vamos So, te conozco mejor que nadie. ¿Que te pasa? -dije preocupada, ya me daba demasiado miedo verla así a mi hermana-
Hoy es mi aniversario con Lusiano -dijo entre suspiros-
Oh, ya veo -dije, deje de mirar a Sofia y mire hacia adelante-
-Había un silencio incomodo directamente, volteaba a ver a Sofia y se veía aún más estresada. No se que le pasaba, nunca la vi tan estresada por algo. Sofia siempre fue seca y fría con las personas, y más con su esposo, ellos dos, digamos que no se tienen tanto respeto como las demás parejas.-