CAPÍTULO 25

19 7 0
                                    

*Narra Agatha

Hoy es mi cesaría.
Me levanté a las 8:00 a.m. para darme un baño y desayunar antes de irme.

Mis padres me llevarían en el auto al hospital, ahí la doctora me ingresará para la cesárea y se supone que en cinco días más nos darían de alta si no hay ningún problema.

Mientras desayunaba comencé a llorar.
Este debería de ser uno de los días más importantes de toda mi vida y aunque me sentía feliz por conocer a mi hija, el fruto del gran amor que siento por Patrick, también me rompía el corazón que él no estuviera a nuestro lado en este día tan especial, me aterraba no saber si él siquiera seguía vivo, pero escuchar a mi padre me saco de mis pensamientos.

—Hoy es un gran día Agatha, hoy te convertirás en madre.

—Sí papá, me alegra que ya estoy a unas horas de tener a mi hija en mis brazos… Pero lamento que Patrick no esté aquí, él desde el primer momento estuvo muy alegre con la idea de ser padre de una niña y de formar la familia que perdió y ahora, Denisse y yo lo perdimos a él.

—Tienes que estar tranquila hija, pronto aparecerá y los tres podrán seguir con los planes de vida que tenían— dijo mi madre mientras ponía un plato de panqueques enfrente de mí para desayunar.

—Sé que esto es triste para ti hija, pero, aun así, ustedes dos siguen teniendo una familia que siempre cuidará de ustedes— dijo mi padre con su mano en mi vientre.

—Gracias papá.

—Nosotros las amamos hija y haremos lo posible por cuidarlas como Patrick lo haría si estuviera aquí.

Luego de esa plática comimos todos tranquilos y una hora después salimos en el auto rumbo al doctor, no sin antes hablar con Antonella. Ella dijo que en cuanto yo despertaré de la cirugía le marcarán para que ella, Dominica y Jeremy fueran a conocerla, y para que Jeremy informará a Carlos y a su familia.

Se suponía que ellos venían en camino, en la noche Carlos habló con Jeremy y dijo que en la madrugada tomarían el avión para venir aquí y que en cuanto llegarán se irían directo al hospital a conocer a su ahijada.

Llegamos al hospital y la doctora me saludo, yo le respondí el saludo y procedí a cambiarme.

Mi madre entraría conmigo a la sala de parto, mientras que los demás estarían en la sala esperando noticias.

—Todo va a salir bien Agatha, traeremos a Denisse sana y salva a este mundo… Confía en mí —dijo la doctora mientras me ponía la mascarilla.

Respiré profundo y le pedí a Dios que mi hija llegará bien, eso era en lo único que pensaba mientras empezaba a quedarme dormida.

—.—.—.

Narra Patrick

No había perdido la cuenta de los días de embarazo de Agatha y si todo había seguido bien durante el tiempo restante del embarazo antes de que me secuestran, hoy nacería mi hija, hoy miércoles 19 de junio del 2019.

Me enfurece no poder ser lo primero que Denisse viera al nacer, aunque sabía que sus abuelos y mi familia estarían ahí para las dos, me entristece no poder estar ahí porque yo le aseguré a Agatha y a Denisse que nunca las dejaría solas porque somos familia.

Mientras tanto, yo seguía encerrado en este maldito infierno, pero era cuestión de días para poder terminar con todo esto, ya que este fin de semana se llevaría a cabo el motín para poder huir de aquí.

Ya estaba todo listo, los peleadores estaban decididos, las armas ya estaban bajo el cuadrilátero y John no había contratado más seguridad de la que hay, generalmente eran veinte hombres aproximadamente y nosotros éramos más de treinta peleadores, no nos superaban, pero tenían mejores armas (armas de fuego), y serían peligrosos. Por eso el primer objetivo era desarmarlos.

Los más fuertes nos encargaremos de atacar y desarmar a esos mientras los demás empezaban la huida hacia los autos y una vez que abordarán, pasarían por nosotros para irnos.

Pero en lo que llegaba el momento, todos habíamos seguido con nuestras vidas como si no planeáramos nada, entrenábamos y bromeamos como todos los días, yo seguí con mi rutina entrenando a Axel y simulando entrenar con Andrés, mientras los demás peleadores bromeaban y jugaban como de costumbre. Sin embargo ese día, mientras entrenaba con Andrés, me quebré por completo, me tiré en el cuadrilátero y empecé a llorar por el dolor y la importancia por no poder estar con mi familia.

— ¿Qué sucede Patrick? -

—Hoy nacería mi hija, su nombre es Denisse y me siento muy triste porque no puedo estar ahí con ella y con el amor de mi vida.

—Lo lamento Patrick, pero pronto podrás estar con ellas, está claro que serás un buen padre, lo has demostrado en el cuidado, amor y compasión que tienes con Axel y estoy seguro de que esa niña tendrá al mejor padre que hará lo mejor que pueda para que no sufra lo mismo que él —me dijo mientras me extendía la mano para ayudarme a levantar.

—Gracias Andrés, por tu amistad, tu apoyo y tu comprensión a lo largo de los años. Te convertiste en un hermano para mí y una vez que salgamos de esto, puedes venir conmigo si lo deseas… Tú, Axel y yo somos una familia también.

—Será un placer Patrick, me encantará formar parte de esa familia… Seré el tío más consentidor, para Denisse y para Axel. — dijo entre risas.

—Estoy seguro de eso, Axel sería como un hijo para nosotros, estoy seguro de que Agatha lo querrá y espero que él pueda ver a Denisse como una hermana a la cualquiera y proteja, y que llegue a vernos a Agatha y a mí como unos padres cuidadosos y amorosos.

Nos abrazamos y me dio un sentimiento de alegría, a pesar de que ya casi no me quedaban miembros de mi familia biológica y aunque odiaba admitirlo, está horrible vida también me había regalado grandes amistades que se volvieron la mejor familia que pude haber tenido, amistades como Jeremy, María, Carlos, Dolores y también Andrés me llenaba el corazón de alegría, junto con Agatha (y por ende Denisse), fueron las mejores decisiones que pude haber escogido, los amo y jamás los dejaría porque nos habíamos vuelto familia.

Solo esperaba que todas estas personas pudieran seguir en mi vida sin correr más riesgos y que el resto de los peleadores que nos apoyarían en este motín también lograrán huir y tener una mejor vida, tanto o más como la vida que a mí me esperaba al regresar con mi familia.

SIÉNTEMEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora