Pablo tenía fama de desobediente. Ningún profesor del instituto quería tenerlo como alumno. Era todo un desafío, era la pesadilla de todos. Habían algunos que renunciaban a su trabajo para no verlo más. No había persona que lo domara. ¿O sí?
Robert Lewandowski, un hombre proveniente de Polonia, se había mudado a España para trabajar como profesor de Geografía. Lo habían aceptado en un colegio no muy conocido de Barcelona.
El tenía mucha paciencia, quizá los adolescentes no le serían problema. O quizá Robert era muy iluso.