8.

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Omnisciente

Lincon se encontraba fregando los pisos con mucha rapidez, por su mente solo pasaba una y otra vez las tareas que Mitsuki le había encomendado para antes de aquella noche, pulió cada objeto , lavo cada cortina, tapete  y trapo.

Colocó una larga mesa para todos los invitados, con todo perfectamente limpio y alineado, ¿el motivo?

Hoy era una junta muy importante para Mitsuki, hablaría con los jefes de otras bandas, para arreglar asuntos, aunque en el fondo todos sabían que la invitación era simplemente para pasa un buen rato bebiendo y siendo servidos por los desafortunados esclavos de cada jefe.

¿Las reglas?, eran sencillas, debía permanecer parado toda la comida en una esquina, solo podía acercarse si su amo le daba una señal, y dependiendo de esta debía traer o más vino o dar la orden para traer el siguiente plato.

Era sencillo y Mitsuki confiaba en que nada saldría mal, de hecho contrato a dos cocineros para que lincon pudiera priorizar todo lo demás, si el menor cometía un error esta noche lo iba a pagar caro, muy caro

La mesa ya se encontraba completamente preparada, vendrían un total de 15 invitados sin contar a los esclavos, mascotas o sirvientes de dichos invitados

Lincon tocó la puerta de la habitación de su amo

-pasa de una vez- se escuchó del otro lado

Él omega entró a la habitación, con un saco recién planchado en sus manos, hizo una reverencia y observó a su amo, estaba vestido con una camisa blanca y unos pantalones negros

Lincon se acercó y le coló el saco a su amo , el mayor se vio en el espejo, buscando alguna imperfección en su traje, para suerte de lincon no la encontró

Mitsuki se dio la vuelta y levantó con fuerza el mentón de lincon, quien lanzó un pequeño quejido ante la repentina acción, en cuanto vio que Mitsuki lo analizaba decidió apartar la mirada

-eres un desastre..., vamos a tu habitación-

Dijo para luego tomar fuertemente de la muñeca al omega y llevarlo a la planta de abajo .

-desvístete-

El cuerpo de lincon comenzó a temblar, no iba a cojerselo ahora ¿cierto?, pensó

El menor se quitó cada prenda de ropa y la dejó doblada en su cama

Mitsuki tomó al menor sin cuidado alguno y lo arrojó a la bañera que para suerte de lincon, ya se encontraba con agua, helada pero peor era nada

Él beta tomó uno de los shampoos para el cabello y comenzó a aplicarlo en la cabeza del menor, luego le ordenó que terminara de bañarse

Cuando lincon salió del baño vio a Mitsuki eligiendo algo del closet, en la cama visualizo un conjunto de ropa que consistía en una falda azul marino una camisa blanca y un saco gris

-comienza a vestirte- ordenó mientras seguía observando el closet

El menor obedeció la orden y se colocó una a una las prendas

Una vez vestido, bajo la mirada y espero a su amo

Mitsuki le lanzó una peluca de color rubio larga

-lo diré rápido inútil, cada vez que vengan personas que no son parte de mi familia, cambiaras de aspecto-

Lincon asintió

-eso también incluye tu color de ojos y piel, pero esta vez dejaremos tu piel en paz-

Él beta se acercó al omega , colocó sus manos en la mandíbula del menor y con fuerza lo levantó, mientras apretaba sus mejillas

-usaras lentillas verdes y gafas con marco negro circular- comenzó a mover la cabeza del omega buscando alguna imperfección en su piel o en su corte de cabello, para suerte del menor no encontró nada

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