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----------------------------------------------Narra eugeo------------------------------------------------------------------

Tener la bendición de mi padre fue algo bastante inesperado que jamás me espere tener en verdad, siempre fue un hombre bastante duro y jamás me dio un solo abrazo o una sola palmadita en la espalda como suelen ser los padres con sus hijos.

Nunca tuve esa suerte de afecto de parte de mis padres, mi madre siempre fue alguien bastante mimada, con orgullo puedo decir que su influencia no cayo en mi ni en mi hermana.

-eugeo solo puedo decirte que muchas felicidades por tu futuro matrimonio – enfrente mío mi padre caminaba de un lado a otro

-se lo agradezco que lo aceptara – mi mente se encontraba en los reportes de mis hombres

No estaba totalmente enfocado en mi padre.

-sabes la responsabilidad que caerá en ti cuando digas el sí, ¿verdad? – esa pregunta me molesto

¿Qué estaba jugando?

Siempre supe desde niño cuales son mis responsabilidades.

-lo tengo bastante claro padre, desde niño siempre tuve en cuenta que jugar a la casita no es algo con lo que deba tomarse como un juego – ahora si tenía mi atención en totalidad

-no me refiero a la responsabilidad de esto eugeo, me refiero al peligro que vendrá luego que te cases con tu prometido – dejo de caminar

Se acerco a mi escritorio apoyando ambas manos en el

-que quieres decir con eso? – la curiosidad me mataba

-tu sabes perfectamente que kazuto es un kirigaya y eso implica que los enemigos que tiene su familia y tuvo su madre vendrán a por el como paga por todo el dolor o una miserable venganza que ellos tengan con esa familia, kazuto tiene un poder dentro de él, yo lo vi el día que nació y no dudo que vendrán a por el como una ofrenda – su voz sonaba preocupada y muy seria a la vez

No es algo común en mi padre preocuparse por los demás

Si llega a preocuparse por alguien más o alguna persona es un asunto bastante serio o lo llegara hacer, muy pocas veces son las que puedo mirar una emoción en ese rostro tan frio de mi padre

-padre –

-tienes que protegerlo a toda costa –

-ese es mi deber como su prometido y casi esposo, siempre protegerlo y hacerlo feliz hasta su ultimo día – sincere mis sentimientos.

Mi padre me regalo una pequeña sonrisa antes de volver a su habitual seriedad de siempre.

-estuviste investigando a los kirigaya verdad – no me sorprendió que sospechara de las hojas de mi escritorio apiladas

-si, necesito estar listo e informado – se sentó en mi escritorio tomando mis notas en el proceso

-para que necesitas esa información eugeo – agarre un poco de aire antes de hablar

-necesito esta información por el bien de nosotros y el de kazuto, el puede tener una habilidad sobre natural que el no sepa aun, puede tener dudas sobre su familia, puede preguntar directamente el sin duda alguna y con todo derecho, solo que kazuto no tiene la confianza aun de pedir información- escucho todo atentamente

Miro mis hojas antes de volver la mirada hacia mi nuevamente.

-tengo que estar un paso por delante de todos- finalice mi discurso

-bien, ten cuidado con lo que investigas, debes decirle a kazuto también, el es un kirigaya y menos olvides que el quiere información de su madre, yo solo le otorgo recuerdos, fuera de esa área no tengo mas -

-prefiero guardármelo –

-eso destruirá tu matrimonio, más estaré de su lado cuando el mencione que tiene el derecho de saber algo mas cuando es de su familia, si no confías en él, para que te vas a casar –

Sus palabras resonaron mucho en mi mente una y otra vez, cada vez mas fuerte, como si fueran un ego, cada vez más fuerte se repetían sus palabras

Sin decir otra palabra Sali de mi oficina y me dirigí al campo de entrenamiento, sabia que kazuto junto Alice y quincella estarían allí mismo a la misma hora de siempre, nunca faltan a su entrenamiento oficial

Me encanta verlo esforzarse, el como se exige mucho, además de tener una espada bastante pesada de color negro que mando hacer con unos ahorros que el mismo junto para esa espada.

Desde el primer, que día que llego cambio demasiado, si veo al kazuto de antes con el de ahora son personas muy diferentes, el nuevo kazuto es mas alegre, mas seguro de si mismo y mas alegre que nada, sin miedo en sus ojos, al contrario, está lleno de valentía y de comerse al mundo con aventuras locas.

-eugeo llegaste – mi hermana se abalanzo sobre mi casi tirándome

-bájate gorda! - obviamente no pesaba nada

Solo me gusta molestarla, a juzgar por su expresión logre molestarla.

-eres un cabron – agarre sus manos antes que pudiera darme un golpe

Parecía una enana rabiosa.

-intenta golpearme y sabes que te va ir peor –

Solo nosotros dos nos entendemos

-dejen de pelear – kazuto se metió en medio de nosotros para acomodar en mis brazos

Últimamente esta muy cariñoso y se enoja cuando no le abrazo

-ah! A kazuto no le dices nada y a mi si –

-yo tengo derecho, tu no –

No pude evitar soltar una carcajada, enserio kazuto se la dejo en su lugar respecto a lo de su lugar en los abrazos

-eugeo mañana te tomaras el día libre – me estaba por negar si no fuera por su mirada que prometía enterrarme vivo si decía algo negativo

Asentí, su sonrisa volvió. Enserio me tiene loco  

Mi Feliz MatrimonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora