Siempre A Tu Lado...

22.Miente

Nos fuimos a algún lugar que podríamos dormir, volvimos a poner la cuerda con latas y la carpa, ninguno de los tres pudo dormir. Pasaron días, semanas, incluso meses desde la prisión ya nos estábamos creyendo la idea de que los demás estén muertos.

Ya era invierno y nos encontramos ropa abrigada en una tienda a si que con eso nos manteníamos más abrigados, cuando volvimos a la carretera seguimos buscando, no sólo un lugar para quedarnos, si no pistas de donde estaban los demás

En eso encontramos una funeraria, había un cementerio, estábamos a unos metros de ella, vi un Caminante y le pedí la ballesta a daryl, todo este tiempo me enseñó a usarla, Beth me veía contenta, abence y no note una trampa, pero al caer logré dispararle al caminante

-le di!- dije feliz -si pero estas bien?- pregunto daryl parándome -si, no alcanzo a tomarme el pie, solo un poco- dije ya de pie, seguimos caminando y yo hiba cojeando -te duele?- pregunto daryl -lo normal- conteste, el se agacho para que me subiera en el -no voy abhacer eso, estamos a solo metros de la "casa"- le dije yo -vamos- dijo Beth -como sea- dije volteando los ojos y subí sobre daryl, Beth tomó su mochila y la de daryl y yo llevaba la mía en la espalda -no les estoy haciendo mucho peso?- pregunte -solo estamos a metros de la "casa"- dijo Beth riendo

Entramos y tiramos nuestras cosas en la entrada, al ver que estaba bastante limpia y con comida, nos sentamos en la mesa y saqué unas cosas de la despensa, comimos algo y se hizo de noche, vi a Beth sentada en el piano y ella sonrio, fui a ver a daryl pero me lo choque en la entrada de la habitación -ay, justo hiba a buscarte- le dije mirándolo, el sonrio y me beso

Paso junto a mi lado y se acostó en el ataúd que estaba ahí dentro -no nos queda mucho para estar aqui no?- dijo daryl -no seas idiota- lo regañe -estas manifestando- me queje en broma -que?- dijo riendo -nada- conteste yo también riendo -es lo más cómodo que encontraremos por ahora- dijo el -quizás- le contesto Beth -por que no todas un poco?- le dijo daryl, yo me senté en las sillas que estaban ahí -creí que te molestaba mi canto- le dijo Beth -tenemos un momento para eso, tenemos un refugio y no nos pasará nada, al menos está noche, puedes hacer lo que se te de la gana- contesto el -bien-dijo ella y comenzó a cantar, su voz era hermosa, de verdad me transmitía paz

Pasamos unos días en ese lugar, hibamos a comer una noche, daryl llevó a Beth en brazos y luego me llevó a mi -que caballeroso señor dixon- le dije riendo -muero de hambre- dijo Beth -pues come- dije obvia y ambas reímos, comenzamos a comer y escuchamos las latas -mierda- dije -quédense ustedes aquí, yo voy- dijo daryl, me pare de la silla junto a Beth y tomamos los cuchillos viendo lo que hacía daryl en la puerta, el vio por la ventana y luego la abrió tiro el pedazo de carne que tenía en la mano -es un maldito perro!!- dijo alzando la voz para que nosotras escuchemos -vamos amigo come, después te lo van a quitar- dijo para luego cerrar la puerta, seguimos hablando un rato más y volvimos a escuchar las latas -le daré la última oportunidad a ese perro- dijo daryl levantándose molesto, escyche habría la puerta pero luego gritaba nuestros nombres, corrí a ver y eran caminantes

-corran!! Yo las cubro ya!!- nos dijo el -no pienso dejarte!!- le dije -no lo haras solo corre!!- me insistió, Beth tomó mi mano y salimos corriendo, paramos un momento -escóndete, toma por cualquier cosa- le dije dándole un arma y un cuchillo -a donde vas?- pregunto preocupada -voy por daryl- dije para luego correr, lo vi atrapado con aproximadamente 3 a 4 caminantes y comenze a matar a 2, el mato a los demas -mierda, que haces aquí?- pregunto cansado -y Beth?- pregunto -se escondió afuera, no se donde le dije que volvería por ella- conteste

Ambos salimos corriendo y vimos un auto negro con una cruz blanca atrás, corrimos detrás de él pero fue prácticamente imposible -no, no, es mi culpa.. no tuve que dejarla sola- dije al borde de las lagrimas -la encontraremos si? No es tu culpa hiciste lo que creíste correcto- dijo el -lo siento- le dije, sabía que todo este tiempo el le tomó un gran cariño a Beth, yo también