Mi madre no entendía el porque de mis incansables e insanables ganas de escapar de ahí, durante el año que estuve viviendo con ella intentó por todos los medios que me quedará, pero yo ya llevaba tiempo con la decisión tomada, sabía que nadie me haría cambiar de opinión.
Por lo tanto, me esforcé todo lo que pude para conseguir entrar en la universidad que quería, llevaba tiempo buscando por la perfecta universidad que consiguiera que los monstruos de mi pasado se olvidaran. Debo reconocer que siempre supe que esos demonios se quedarían ahí, nadie los conseguiría nunca matar, quería creer que al huir de casa pasarían desapercibidos.
-Eleanor, ¿estás segura? Sabes que si prefieres quedarte en casa y trabajar para tu tío puedes.
-Mamá, ya estaba todo decidido no vuelvas a lo mismo... Encima, que ya hemos llegado al campus.
-Lo sé cariño, te echaré tanto de menos...
-Solo hemos estado un año juntas, no notarás ni mi ausencia.
-Sabes que siento los años que me he perdido de tu vida y eso no cambia que este año ha sido uno de los mejores al tenerte junto a mi.
-Adiós mamá - me abrazó y se fue. Nunca entenderé porque le cabrea tanto el hecho de que me vaya a una universidad que esta a 7 horas de casa, tuve que escapar porque estaba volviéndome loca, no puedo evitar pensar que tal vez si mi madre no se hubiese ido nada de esto hubiera pasado. Oigo unos pasos que corren desesperados y de repente veo a mi mejor amiga Valeria corriendo hacia mi.
-¡¡¡¡EHHH, que ya estamos en la universidad!!!!-dice mientras me da un abrazo.
-Lo sé, es muy loco que ya estemos aquí. Desde ahora nuestras vidas cambian,
-Trato hecho.
-¡Valeria dame un abrazo que me voy. Hola Eleanor, que gusto verte, espero que los pasen muy bien y las dos tenéis que venir a casa cuanto antes! - Sara, la madre de Valeria, apareció mientras le daba a su hija la maleta y se despedía de nosotras con un beso.
-Lo conseguiste Lenny- me dijó mi mejor amiga mientras me miraba con emoción. No sé que hubiese hecho toda mi vida sin ella y sin su familia, que son como mi familia.
-Bueno, vamos a investigaar Val.
Fuimos viendo cada centímetro y rincón del campus, no era nada del otro mundo estéticamente, pero era perfecto por lo lejos que estaba de mi ahora antiguo hogar y porque era una universidad pequeña. Después de andar por todo el campus y ver casi toda la universidad, nos dirigimos hacia la residencia, allí había un hombre bajito y gordo con cara de buenachón, esperándonos para darnos las llaves.
-Hola chicas, ¿sois de primer año?
-Sí- respondimos a la vez.
-Vale, pues... aquí tenéis la tarjeta del comedor, la de las duchas. Emm.. con estas tarjetas tenéis acceso a entrar en donde queráis. Las llaves están aquí.- dijo mientras nos entregaba las tarjetas y las llaves. Por cierto, me llamo Robert.
-Espera, ¿!vamos a estar en habitaciones diferentes?!- se exaltó Val mientras miraba los números diferentes de nuestras llaves.
-Oh vaya, si, lo siento, pero estáis bastante cerca.
-Vaya mierda...- se quejó Valeria.
-Estamos bastante cerca Val, no pasa nada- la animé yo.
-Si que pasa, seguro que me toca una compañera de habitación rarita.
-Jajajaj- se rió Robert mientras Valeria se le quedaba mirando con cara rara.
-Bueno, será mejor que vayamos hacia la habitación, muchas gracias Robert- dije mientras le enseñaba mi mejor sonrisa.
-No hay problema, cualquier cosa me avisáis.
Fuimos andando hacia nuestras habitaciones, que por lo menos estaban en el mismo pasillo.
-¿Entramos primero a la mía y después a la tuya?- le dije a Val, ya que la mía estaba más cerca.
-Vale.
Entramos y nos encontramos con media habitacion vacía, y media llena de fotos de una chica que sería mi compañera. Dejamos las maletas y nos sentamos.
-Se ve jodidamente vacío, eh- dijo mi mejor amiga. De repente apareció una chica china, con mala cara.
-Hola, soy Eleanor, tu compañera de habitación y esta es Valeria, ¿cómo te llamas?
-Me llamó Ying.
-Genial,¿ este es tu primer año?
-No, pero el tuyo claramente si- contestó seca. Vaya, no sabía si nos llevaríamos bien...
-Voy a mi habitación y así desordeno la maleta, ¿cuando acabes vienes?
-Supongo- dije mientras observaba el entusiasmo de mi amiga por conocer su nueva habitación, seguramente se llevaría un chasco al ver que era igual a la mía, ya que ella creía que serían diferentes.
Empecé a desordenar mi maleta y colocar mi ropa, los libros y las cosas que me había traído. Se sentía tan bien volver a empezar, respirar aire nuevo y sentir que mi vida podía cambiar.
Pero lo que no esperaba era que la compañera de habitación de Val cambiará tanto las cosas...
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born to die
RomanceNecesitaba escapar. Huir de la forma más cobarde. Pero en cierto modo, sabiendo que era la más valiente. Cambiar de aires. Atreverse a lo desconocido... Pero nunca esperé llegar a tal inesperado punto. Encontrarte lo cambio todo.