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🐰🐰🐰
Hanni la volvió a besar, tenía tantas ganas de no dejarla hablar que solo quería concentrarse en hacerla reír cuando sus intentos eran en vano.
Así que estaba babeado, feliz, pero babeado.
—Bue-ehw-yo- Ah-bue... no —intenta decir Minji y suelta una carcajada al final cuando se rinde.
—Feliz aniversario, listo, te gané —Hanni aprieta su nariz suavemente cuando la ve hacer pucheros.
—Pero es trampa, me distrajiste... Feliz aniversario... —el suspiro de derrota anima a Pham a llevar una de sus manos a la bolsa de papel que tenía detrás de su cuerpo—. i¿Para mí?! —la más bajita asiente mientras se lo entrega, mientras la mira tratar de abrirlo, olvida que Minji había llegado haciendo un escándalo y con tantas cosas en mano que no supo reaccionar a tiempo a todo.
Minji era intensa, le encantaba que fuera intensa y demostrativa.
一¡¿Crayones?!
La cajita de 64 colores diferentes la tenía hipnotizada, seguro pintaban del mismo color pero que más daba si Hanni se lo había dado.
—Te traje los crayones que te gustaron la otra vez, y los dulces, y el cuaderno para pintar, y... ¡Ah! Bueno, también hice unos dibujos.
Minji finge llorar mientras la toma de los hombros.
—Hanni esto es... es tan...
—Tan homo —Hanni permanece en silencio cuando su intensa pelea de miradas la hace fruncir el ceño y vuelve a alzar la voz—. Minji, literalmente somos novias desde hace meses.
—Sí, ya lo sé, y es magníficamente homo, me gusto mucho —entre sus manos inspecciona el libro de colorear con diferentes animales que están a blanco y negro.
—¿Si? —su vocecita, quiera o no, la hace suspirar en miles de idiomas.
—Sí... Oye, ¿te imaginas?
—¿Qué imagino?
—Que te amo —Minji deja un enérgico beso en su mejilla, así mismo la rodea en sus brazos cuando la intimidad del momento la hace sentir cómoda.
—Yo igual te amo-
—Rdido un perro.
Hanni se queda en silencio, seria.
—No me hace gracia.
—Que raro que no, era bromita, mi amor —esta la mira con ojos amenazantes, y alza su pequeño puño—. ¡Hanni...! ¡No, los niños me extrañarán...!
Ah, sí.
Resulta que doña enojona se enamoró de doña bromitas.
