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– ¡No te atrevas a castigarme de esta manera Wei wuxian!
– No dejaré que me humilles de esta forma, no más, no lo aguantaré, estoy enterado de lo que haces a mis espaldas...
– Lo verás está noche -Afirmo- ¿No es así? –Sabia que su pregunta era más que estúpida, ya sabía la respuesta, ocultando el ligero temblor de su voz alzo la mirada, retando a aquel alfa que lo miraba con desen- De nuevo verás a Lan Wangji
– Si no vienes a Yumeng te juro que no volveré a confiar más en ti, esto terminará en el momento que toques a alguien más, buscaré la forma de romper la unión, así tenga que unirme con otro alfa
– Oh A-Cheng... -Se burló acercándose hasta posarse detrás del Jiang, mirando con arrogancia aquella marca que lucía sobre su nuca- ¿Quién querría marcar a un Omega como tú? -Escupio con malicia, antes de susurrar con seriedad- Ya estás sucio A-Cheng...
Ese había sido un golpe bajo, el alfa lo sabía, pero, ¿Le importaba acaso?
– Te sorprendería saber quiénes hacen filas solo para tenerme en su cama –Se defendió con irritación-
– Me complace que tengas en mente el deber que tienes, solo calentar la cama -Tomo con brusquedad su mentón importa dile poco el tacto, obligando a que lo mirara, los ojos antes grises pasaron a un rojo vibrante y peligroso- La mía
El menor se alejo con brusquedad, alzando su rostro retador, no queriendo flanquear por la imponente aura de energía resentida que desprendía el Alfa
– Entonces demuéstralo, ven conmigo esta noche, te estaré esperando en mi pabellón -Murmuro con molestia, alejándose de aquel lugar que era su punto de reunión entre ambos-
Confiaba en qué Wei wuxian lo visitaría, siempre le había profesado amor y lealtad...no tenía por qué dudar, ¿Cierto?
Cortó lo sé, los demás irán alargándose poco a poco.
