1. Thank U Yoongi Hyung (YOONMIN)

DOS

Jimin miró al chico delante suya aterrado, y se estaba preparando para pegar el grito de su vida, pero antes de poder incluso coger aire el chico se acercó a él y le tapó la boca con la mano.

--No chilles, no te voy a hacer nada-- dijo el chico. --Solo huyo de la poli

¿Huir de la poli? ¿Eso no lo hacían los criminales? pensó Jimin

Jimin se asustó aún más y en un acto de valentía alargó la mano hasta su escritorio para coger unas tijeras y apuntar al chico con ellas, lo que hizo que este se asustara y retrocediera dejando libre a Jimin.

Al contrario de lo que pensó Jimin, no chilló, sino que se quedó con los labios pegados en una fina línea y con el deño fruncido, hasta que se atrevió a hablar.

--¿Quién eres? ¿Por qué estás aquí? ¿Qué has hecho?-- preguntó Jimin apuntando con las tijeras

--Poco a poco-- dijo el chico con burla. --Mi nombre no te lo puedo decir, y estoy aquí porque estaba huyendo de la poli y me iban a coger, así que he subido a tu habitación porque la ventana estaba abierta, nos han pillado con porros

--Eres un criminal-- acusó Jimin. --Voy a llamar a la policía

--Claro que no soy un criminal, porque si no esta nava-- dijo el chico sacando rápidamente una navaja del bolsillo de su sudadera. --Estaría clavada en tu cuello y las paredes llenas de sangre

Jimin tragó duro del miedo, pero eso no evitó que dejara de apuntarle con las tijeras, aún seguía siendo un desconocido que había entrado a su habitación por la ventana. Se quedó un rato mirándolo y lo analizó de pies a cabeza.

Llevaba unas botas militares negras desatadas y desgastadas; unos vaqueros rotos negros y una sudadera del mismo color; de su cara, lo único que podía ver Jimin eran sus ojos, debido a que llevaba un pasamontañas, gatunos y oscuros. Todo su aspecto pasaba a segundo plano cuando se fijó en su pelo, de un color verde que Jimin se atrevía a catalogar como menta.

--Es coña-- dijo el chico lanzando la navaja a la alfombra al ver la mirada de Jimin. --¿Ves?

--Igualmente te voy a denunciar-- dijo Jimin. --Allanamiento de morada

--Yo encantado me iría-- dijo el chico. --Pero siento que como me mueva, aunque sea un centímetro, me vas a clavar esas tijeras en el ojo

--Vale, te dejo ir-- dijo Jimin dejando de apuntarlo con las tijeras

En un principio, Jimin pensó que el chico saldría como había entrado, pero en vez de eso se alarmó cuando le vio ir a abrir la puerta de su habitación.

--¡¿Qué haces?! -- dijo Jimin en un susurro poniéndose entre la puerta y el chico

--¿Salir? -- dijo el chico con obviedad. --¿No me acabas de decir que me fuese?

--Sí, pero por la ventana-- dijo Jimin señalando la ventana con la barbilla

--Es muy fácil subir, ¿pero bajar? Estás loco-- dijo el chico. --Está muy alto

--Tampoco es mucho-- dijo Jimin

--¿Tu qué vas a saber?-- preguntó el chico mirando de pies a cabeza a Jimin. --No eres el típico que por ahí haciendo parkour para huir de los sitios

--Para tu información hoy salté de una ventana-- dijo Jimin orgulloso

--¿Por eso llevas tiritas de ositos?-- preguntó el chico con burla

Jimin frunció el ceño y se sentó en la cama para tapar sus rodillas con las manos.

--¿Y qué llevaría a un niño de quince años a cometer tremendo acto vandálico?-- preguntó el chico con burla

--¿Cómo que quince? Estoy en segundo de bachillerato-- dijo Jimin indignado. --Y salté porque me iba de casa de mi novio

--¿Por qué no saliste por la puerta?-- preguntó el chico con el ceño fruncido sentándose en la silla del escritorio de Jimin

--Abajo había un amigo suyo y no quería que nos viera-- respondió Jimin con vergüenza

--¿Y eso por qué?-- preguntó el chico con el ceño fruncido

--Tenemos una relación secreta-- suspiró Jimin

--Pues vaya coñazo-- dijo el chico cruzándose de brazos. --Por tu expresión se ve que tu no quieres eso, menudo partidazo

--No pedí tu opinión-- dijo Jimin bruscamente

--Igualmente tengo razón-- dijo el chico

--Vienes aquí de la nada, no me dices nada de ti y te poner a opinar sobre relaciones ajenas-- dijo Jimin indignado. --Estás muy subidito, ya no te diré nada más de mí, ni mi nombre

--Vale Jimin-- dijo el chico acomodándose en la silla y soltando una carcajada tras ver la expresión de sorpresa de Jimin

--¿Cómo sabes mi nombre?-- preguntó Jimin sorprendido y desconfiado

El chico apuntó con su barbilla hacia la derecha de Jimin y este giró la mirada viendo una foto de él de pequeño en un marco donde ponía su nombre.

--No es justo que tú sepas mi nombre y yo no-- se quejó Jimin

--Me llaman Agust D-- dijo el chico finalmente

--Seguro que estás en busca y captura bajo ese nombre-- dijo Jimin con el ceño fruncido. --¿Cuál es la recompensa si te entregan?

--Un chicle mascado te van a dar por mí-- dijo Agust D con burla.

--Mi padre es policía, puedo preguntarle-- contraatacó Jimin

--Como lo hagas el que va a salir por la ventana vas a ser tú, pero de un séptimo piso-- amenazó Agust D

Jimin tragó duro y miró a Agust D con desconfianza.

--Vete ya, me estás dando mal rollo-- dijo Jimin con el labrio fruncido

Agust D se levantó de la silla y fue hasta la ventana, pero antes de saltar se giró de nuevo hacia Jimin.

--Te doy un siete de diez como inquilino-- comenzó a decir Agust D. --Vendré aquí siempre que necesite donde esconderme, aunque la parte de las tijeras sobraba

--Ni de broma-- dijo Jimin. --Da gracias a que hoy te he dejado

--Sí, seguro-- dijo Agust D

Jimin fue a rechistar, pero en el momento que abrió la boca la ventana ya se encontraba vacía. Jimin se levantó de la cama y se asomó por la ventana para ver como Agust D le miró y le hizo un corte de mangas. Con el ceño fruncido Jimin se lo devolvió con el ceño fruncido.

Cerró la ventana y se tumbó en su cama para pensar en lo que acababa de suceder.

¿Tan sólo me siento que tengo que hablar con un completo desconocido?

Jimin no tenía amigos, sólo conocidos de clase con los que hablaba de vez en cuando, pero solo en el instituto. Desde hacía dos años, cuando la familia de Jimin se mudó de Busan a Daegu, sólo había conseguido crear un lazo con Jungkook, aunque ahora ya ni le reconocía.

Limpió la lágrima que caía y en un último ápice de esperanza miró su teléfono esperando un mensaje de Jungkook, pero no había nada.