-Todos están es sus habitaciones majestad- Dice mi mayordomo, sigo sin poder adaptarme a este estilo de vida. Siempre había soñado con eso, que alguien me llamara "majestad" pero algo no se siente del todo bien.
-Entendido, ya puedes retirarte- Digo con un tono se superioridad, sigo esperando mi coronación, será un evento inolvidable, tanto que sigo sin creer que este pasando y que todo esto simplemente es un sueño.
Este día fue desgastante, en el camino devuelta a mi habitación me encontré con mi hermana, Riyeko.
-Hola Riyeko ¿A donde vas?
-Me dirijo a el jardín, no puedo dormir, ocupo aire fresco.
-Entiendo, espero puedas dormir, si te duermes en el jardín no te sorprendas si despiertas en tu cama, hay guardias patrullando, ya sabes como paso la ultima coronación.
Me fui a mi habitación, me cambie con la piyama y me tire a la cama. De verdad ocupaba descansar.
Las campanas empezaron a sonar, lo que significaba que mi coronación estaba empezando, caminé hacia las escaleras para subir al trono donde estaban mis padres esperando con una espada, siempre hubo esa tradición.
Pero justo cuando vi la espada, me acorde de la coronación de mi hermano, le cortaron la garganta con la espada y cayo su cuerpo sin vida al suelo. Entre en un estado de alerta y mi corazón empezó a acelerarse ¿Qué pasa si a mi me pasa lo mismo?
Ya no hay vuelta atrás, ya llegue a las escaleras y mis padres empezaron con la coronación.
-Hoy estamos reunidos para coronar a nuestra hija, Sumiko. Y como su nombre lo indica, ¡Se convertirá en la niña de la bondad! Y ahora demostraremos si le ha hecho honor a su nombre cortándole la garganta y si no le ha hecho honor MORIRA, pero, si le ha hecho honor seremos nosotros quien moriremos significando que ELLA y SOLO ELLA será la heredera al trono.
-¿Estas lista?- Pregunta mi madre, quien agarraba la espada.
-Si, claro madre- Me quede quieta esperando mi final.
Mi madre levantó la espada y cerré los ojos con fuerza, sentí como la espada pasó por mi cuello lo cual me hizo abrir los ojos de par en par.
No sabia que me estaba pasando, mi sangre empezó a caer, una luz empezó a rodearme y me hacia levitar.
Después de un tiempo en la esfera de luz, vi como mi cuerpo empezaba a cambiar, mi pelo rojo empezó a tornarse negro, vi como se abrían más heridas en mi cuerpo, hasta mi vestimenta cambió. Siento como si una tira de papel estuviera sobre mi cara.
Cuando abrí mis ojos vi a mis padres, pero estaban vivos
-¿QUE ESTA PASANDO?- Dije con lagrimas en los ojos, nadie me advirtió que esto pasaría, vi mis manos, tenia un cuchillo por mano.
-No me digas que...- Efectivamente, yo tenia que matarlos. Cuando la luz me dejo ver con claridad, me abalancé sobre ellos, cuando ya estaban muertos, sus cuerpos se desintegraron y corrí de ahí y decidí no volver más.
???
-¿Entonces así fue como tuviste tus poderes?
-Si.. la verdad no siento que debería tener ese nombre.. ¿Podrías cambiarme el nombre?
-Estas bien, de ahora en adelante te llamaras... ¡Kamiko!
-¿Que significa eso?
-Pequeña diosa
Capitulo 1 - Majestad
Terminado