"Como una muñequita"
Venus se despertó entre los cálidos abrazos de Megamo y Saiki. Saiki la rodeaba con ternura por la cintura, mientras que Megamo la abrazaba con firmeza por la espalda. Entre sus cuerpos entrelazados, se sentía protegida y amada, como si nada en el mundo pudiera perturbar aquel momento de paz y tranquilidad.
El suave murmullo de sus respiraciones llenaba la habitación, creando una melodía suave y reconfortante que envolvía a los tres en un abrazo íntimo. Venus se sentía abrazada por el amor y la seguridad que emanaban de sus dos prometidos, y su corazón se llenaba de gratitud por tenerlos a su lado.
Con suavidad, se movió entre los brazos de Megamo y Saiki, disfrutando de la calidez de su contacto mientras se despertaban juntos en aquella mañana llena de promesas.
Sabía que, con ellos a su lado, cualquier desafío que el día pudiera traer sería más fácil de enfrentar, porque juntos, eran más fuertes que cualquier obstáculo que pudiera interponerse en su camino.
-Buenos días princesa- Megamo susurro a su oído haciendo que Venus diera un salto del susto- ¿Que pasa princesa?-
-Bu-buenos dias- Dijo Venus con una sonrisa timida-
-"Buenos días"- Saiki también se levantó-
-Hola Kusu- Megamo besó la mejilla de Saiki y Venus-
Después de un momento de cariño entre los tres, se levantaron gradualmente de la cama. Venus se dirigió al baño para refrescarse y comenzar su rutina matutina, mientras Saiki y Megamo se preparaban para el día que les esperaba.
Saiki, con un gesto de tranquilidad, dejó atrás su pijama y optó por algo de ropa más casual y adecuada para el día que se presentaba. Megamo, por su parte, se aseguró de estar impecable como siempre, ajustando cada detalle de su atuendo con precisión y elegancia.
-Ah mucho mejor- Venus salió del baño- Haber...¿Que puedo usar hoy?- Venus miró su armario-
-Tal vez esto- Megamo sacó un conjunto de ropa- ¿No es lindo?-
-Hmmm no sé- Venus se veía dudosa-
-Oh Venus eres muy adorable- Dijo Megamo- Vamos a arreglarte-
-Esta bien-
Venus se encontró frente al espejo, donde Megamo la esperaba con una sonrisa gentil. Con manos expertas, comenzó a arreglar su cabello, peinándolo con cuidado y dándole un aspecto radiante y saludable con una coleta alta.
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Café con Nata Y Ahora Con Cigarros {Saiki y Tu} {La hermana de Teruhashi}
FanfictionEl era amargo y tosco tal y como el café Ella era dulce y cremosa tal y como la nata Y juntos hacían la pareja perfecta