Serendipia. - James Potter.

1.

Capítulo 1.

Narra James:

Este sería mi año, definitivamente es mi año de conquista hacia mi Lilly flor.

A lo lejos pude distinguir a Remus, quien estaba leyendo al lado de una columna. - ¡REMUS! - se volteó a verme y sonrió.

-Cornamenta - dijo mientras me abrazaba, él y su cariño lo hacían todo más fácil.

-¿Viste a Sirius y a Peter? - dije confundido.

-No, de hecho ninguno de los dos llegó todavía.

-Oh, bueno vamos subiendo.

Fuimos a nuestro compartimento de siempre y nos acomodamos.

-¿Viste a Lilly? - pregunté al rato.

Remus suspiró - Si, y me dijo que no la molestaras.

Hice una mueca. ¿Por qué no aceptaba una cita conmigo? Era un buen chico, la quería en serio, también soy buen estudiante...

-James - miré a lunático que estaba serio y nervioso-, quizás debas dejar de insistir, ¿sabes? te mereces a alguien que te corresponda y no creo que ella lo haga.

Asentí.

Al rato llegaron Sirius y Peter y nos enfrascamos en una conversación sobre las vacaciones y lo que haríamos este año, teníamos muchas bromas que probar antes de que la promoción actual de Slytherin se fuera.

Cuando bajamos del tren, vi a Lilly, iba con sus amigas riendo. Me quedé un largo rato viéndola, hasta que se giró y cuando me vio rodó sus ojos para irse molesta.

Nunca fui de deprimirme ni ese tipo de cosas, pero realmente esas actitudes me dolían, ¿Tan malo soy que no me quiere? ¿Que ni una oportunidad puede darme?

La selección pasó rápido, tenemos 17 nuevos Gryffindor este año. Ahora estamos en la pieza que compartimos los cuatro planeando la broma para quejicus. Será nuestra primera víctima. 

- Un mes después -

Ya llevábamos un mes de clases y me cansé de estudiar, ¿Por qué dejan tantos trabajos para hacer? ¿No se dan cuenta de que tenemos que disfrutar de nuestro cuarto año? Suspiré. Estábamos yendo a la biblioteca a buscar a Remus.

Cuando entramos, lo encontramos... ¿Espiando?

Nos acercamos con cautela y lo llamamos, a lo que se dio vuelta pálido y asustado.

-¿Qué hacen aquí? - preguntó bajo.

-¿A quién espiabas lunático? - dijo Sirius entrecerrando los ojos hacia él.

- Yo no...

- Oh vamos - dijo canuto -, te estamos viendo. - se asomó por donde veía Remus y se borró la sonrisa de su rostro. Fruncí el ceño y me adelanté, a lo que Sirius me tiró hacia atrás. - No es nada importante. - dijo mientras me intentaban llevar a otro lado.

-Suéltame - dije molesto. Los empujé y me asomé.

Y se me cayeron las pocas esperanzas que me quedaban.

Lilly con quéjicus besándose.

Él la abrazaba de la cintura como yo quise hacer siempre.

Ella le sonreía como imaginaba que haría conmigo.

Me di la vuelta y me fui solo a mi cuarto, sé que los chicos se quedaron hablando de algo, pero no estaba con ánimos. Estuve una semana andando en automático, yendo a clases cuando debía, entrenando cuando era el momento, estudiando...

Hoy Lilly vino a pedirme si podía ayudarla con unas cajas que debía llevar a una sala para no sé qué, a lo cual me negué, le dije que no era su asistente. Se sorprendió por mi respuesta y yo también a decir verdad.

Me estuve replanteando hasta que punto estaba enamorado de ella.

Quizás fue capricho.

Quizás fue que no me dio atención.

Pero como dolió verla con alguien más, ahí fui consciente de que nunca iba a suceder conmigo. Y que si pasaba era por ser su segunda opción.