Y allí estaba. El gran problema que habia temido. La marina ya lo había empezado a convocar para algunos encargos y tenía el problema de no poder hacerse cargo de los pequeños. Además de que la educación en casa... Bueno, no iba del todo bien. Perona necesitaba más conocimientos y alguien con la paciencia suficiente para explicarle al igual que Zoro. Y Mihawk nunca se considero alguien paciente. Entonces tomo la decisión de volver al pueblo y buscar alguna escuela. También lo había hablado con zeff, que ya sabía su nombre lo conocía de algún lado. Pero si era Pierna roja zeff!. Al final Zoro entro al mismo jardín que sanji, y Perona en la misma escuela solo que en 3° grado. Por suerte ambos niños tenían una pree educación.
Zoro en los últimos días había empezado a volver a hablar, después de haber llorado por lo menos una semana entera.
Dormía en una especie de camastro cuna para evitar que se cayera y perdiera, cosa que habían comprobado. Tenía un pésimo sentido de la orientación. La primera vez que se dedicó a caminar cuando sus piernas se curaron de las quemaduras, estuvieron buscándolo por mas de tres horas. Al ser un castillo tan grande fue difícil encontrarlo hasta que empezó a llorar por caerse. Desde ese día las escaleras tenían rejas y seguro.Por parte de Perona había demostrado que tenía la suficiente educación para llevar a cabo multiplicaciones. Eso ayudo en parte para que tuviera más lógica sobre lo que sucedía a su alrededor. Ella había estado durmiendo sola y se había adaptado muy bien. Sin embargo solía tener pequeñas discusiones con el menor. La mayoría eran intentendibles o ilogicas, pero siempre había un juguete involucrado. Una vez la cabeza de un peluche de Perona estaba separada en una línea recta, acto de Zoro. Desde allí empezó a restringir el contacto de la espada con el menor.
Tambien había quedado con zeff para ayudarlo a cuidar de ellos algunos días al mes para poder realizar su trabajo a con la marina. Y tenía pensado dar el siguiente paso para ser el verdadero padre de los pequeños.
Había comprado sus uniformes, libros y mochilas el día anterior, y ahora le tocaba escribir los nombres de los niños en cada una. Acomodar sus mochilas fue difícil con las constantes peleas de los útiles que cada uno quería llevar, y lo peor fue despertar tan temprano para hacer el desayuno. Perona necesito ayuda para arreglarse, en especial su cabello, y Zoro no quería despertar. Empezaba a agotarse de todo esto y era el primer día. Cuando por fin logro vestirlos, hacer el desayuno y atenderse a si mismo no pudo resistir el instinto de tomarles una foto a sus pequeños.
Caminaron tranquilamente por el bosque que empezaba a verse más luminoso y verde con la primavera a la vuelta de la esquina. Cuando al fin llegaron Zoro se mostró necio a entrar, y al final Perona lo tomo de la mano caminando a su lado. No fue necesaria la resistencia cuando vio a sanji.
Mihawk permaneció de pie mientras los veía alejarse hasta que se detuvieron por un momento. Ambos voltearon con una sonrisa y le dieron la despedida.
-Adiós, papá!
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Que bonitos ❤️ les está gustando? Espero que si. Les aviso que va a haber varios saltos temporales en esta historia para mostrar el crecimiento de los niños, la dificultad de cada etapa para Mihawk y la progresión de su relación ⚠️. Espero eso no les moleste. Hasta aquí por hoy ❤️
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Los hijos de Mihawk
RandomDónde unos pequeños niños de cabello verde y rosa roban el cariño del mejor espadachín del mundo: Dracule Mihawk, quien a su vez tiene que enfrentarse a sus problemas como Shichibukai al enamorarse de uno de los cuatro emperadores. Ahora, con un amo...