Secretos (Kirishima x Bakugo)

Respira

Bakugo suspira por quinta vez y le da un golpe a la almohada. No podía dormir y esa era una de las cosas que más lo molestaban. Hunde la cara en la almohada y gruñe fastidiado al saber que esta sera otro noche en la que no pueda dormir. odia el insomnio pero decide levantarse de la cama

Se acerca a su escritorio y abre un cajón con varios papeles y cuadernos los cuales levanta para buscar algo que se había esforzado por esconde bien. Saca de debajo de los papeles un caja de cigarrillos y un encendedor. Se los guarda en el bolsillo y se pone su abrigo y zapatos. intenta abrir lo más silenciosamente la puerta de su habitación y se escabulle por la residencia asta llegar a la puerta trasera la cual el ya sabía que hacía menos ruido que la puerta principal. La abre despacio y sale hacia oscura noche sin importarle que este prohibido por los profesores de la residencia luego de las 10:00 pm

Deja la puerta ligeramente abierta para no hacer ruido cuando vuelva a entrar y rodea la residencia entrando por los árboles en busca de un lugar donde nadie lo atrapará fumando

Se apoya contra un árbol y enciende el cigarrillo pero cuando da la primera calada, levanta la vista y ve algo raro entre las ramas. Una silueta negra que parecía estar echa de puras sombras que contrastaba con la luz de la blanca luna que se encontraba detrás dando un perfecto y aterrador recorte de ese extraño ser que lo logras asusta a Bakugo provocando que se ahogue con el humo del cigarrillo y empiece a toser

—¡Mierda...— exclama Bakugo del susto mientras tose —¡Me… sorprendiste!— grita enojado sin querer admitir que fue más un susto que una sorpresa

—Lo lamento- se disculpa Tokoyami con su voz lúgubre y apagada mientras apunta una linterna hacia su cuerpo —También estoy aquí para fumar antes de dormir, no fue mi intención asustarte— explica mientras mueve la mano mostrando el cigarrillo para luego llevarlo asta su pico dando le una calada a su cigarrillo

—...No sabía que fumabas— comenta Bakugo volviendo a apoyarse contra el tronco

—Bueno, no es algo de lo que presumir, además de que me expulsarían si saben que fumo— admite encogiéndose de brazos

—Si, entiendo— murmura Bakugo mientras considera la idea de irse a fumar a otro lugar para estar solo aunque la presencia tranquila de Tokoyami no lo molestaba tanto

—¿Estás preocupado por lo la decisión de los profesores?— pregunta Tokoyami mientras vuelve a apuntar la linterna a su cuerpo unos segundos y la vuelve a apagar

—No— responde y le da otra calada a su cigarrillo pero solo tardo un segundo en volver a hablar —Quizas... Un poco— murmura soltando el humo

—No creo que te expulsen— como siempre Tokoyami habla con una calma y seguridad que ayudaban a plantar una semilla de esperanza dentro de Bakugo quien había aceptado la idea de la expulsión como una sentencia de muerte decidida a cumplirse

—¿Y tu cómo lo sabes?— pregunta levantando una ceja desafiante sin estar dispuesto a ser positivo porque eso significaría que le dolería más si resulta expulsado —Si los profesores no me echan los alumnos se irán a quejar asta que si me expulsen… porque ahora todos me ven como una paria social... Como un loco, un villano— baja la cabeza viendo hacia el pasto y las raíces del árbol que sobresalían de la tierra.

—Lo se porque no eres el primero ni el último en esta escuela en ser visto así— responde mientras vuelve a encender la linterna solo unos segundos antes de apagar la otra vez

Bakugo levanta la vista hacia la rama donde Tokoyami estaba sentado y lo mira con una clara molestia en el rostro —Entiendo que me estés tratando de consolar y apoyar y toda la mierda pero asta donde yo se ningún otro alumno a estado tan cerca de la expulsión desde hacia décadas, todos mueren por entrar a esta escuela y yo fui el único idiota que se encargo de desperdiciar su suerte al conseguir el ingreso