En el trabajo, Minho ya no estaba rindiendo lo suficiente, teniendo un bajo rendimiento de manera drástica en tan solo una semana. Desde capturar mal los datos, tirar el café por todo su escritorio, olvidar preparar la sala de juntas, e inclusive olvidando sus propias pertenencias al salir, sus amigos sabían que algo no estaba yendo bien para él.
Por ello, esa misma mañana cuando Seungmin y Jeongin miraron al ascensor en cuanto las puertas se abrieron y Minho traía un sobre entre sus manos, se dispusieron a cuestionarle que era lo que ocurría.
Minho caminó hasta su cubículo, dejando sus cosas sobre el escritorio mientras no apartaba la mirada del sobre. Seungmin se cruzó de brazos mientras Jeongin lo observaba desde el otro extremo de su área de trabajo.
— Buenos días, Minho. ¿Cómo estás hoy? — Inquirió el menor de ellos dos, buscando captar su atención al solo pasar entre ellos a su cubículo.
El azabache no contestó, tomando asiento.
— Hey, Lee. — Seungmin agitó su mano delante de su rostro, pero no logró el resultado que esperaba.
Aquella mañana no estaba yendo del todo bien para Minho, desde que no sonó la alarma y tuvo que alistarse de manera rápida para el trabajo, alistar las cosas de Lía y salir del departamento de manera apresurada, sin encontrar un lugar cerca en el estacionamiento de la empresa y teniendo que aparcar demasiado lejos para su gusto, llegando tarde para dejar a Lía en la guardería y checando su hora de entrada por un par de minutos de atraso, sabía que eso traería consecuencias al momento de su paga. Era mínimo, pero no podía permitirse despediciar su dinero y hacer que le descontaran, no cuando todo su dinero se estaba dirigiendo hacía un abogado.
Porque sí, Lana había mandado una notificación de juicio a los tres días desde que apareció, sin darle mayor oportunidad de hacerse a la idea a lo que se enfrentaba. Necesitaba conseguir un buen abogado que pudiera defender su caso y que además estuviera entre sus límites económicos, pero eso estaba siendo casi imposible. No había horas extraordinarias en la empresa, no podía conseguir un segundo empleo por el horario que tenía y no pensaba recurrir ni a sus padres ni a nadie por ayuda monetaria, ese era su problema y él mismo lo resolvería.
Estaba tan sumido aún leyendo la notificación que el abogado de Lana le había hecho llegar, que se sobresaltó cuando sintió unas manos plantarse sobre sus hombros.
— ¡Hombre, qué te pasa! — Seungmin gritó cerca de su oreja, provocando que soltara la notificación.
— Perdón, buenos días. — Contestó una vez que estuvo consciente de las miradas de sus compañeros de trabajo.
— ¿Qué es lo que ocurre? Estos días estás demasiado alejado, inclusive distraído, BangChan ya lo notó con lo de la junta pasada y estamos preocupados que te esté ocurriendo algo en particular. — Mencionó Jeongin con una expresión seria.
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Save my life - Minsung
Lãng mạnDónde Minho es abandonado por la mujer con la cual pensaba formar su vida entera en ella, dejándolo a cargo de una bebé recién nacida; o en dónde Jisung, su vecino del departamento 511, lo ayuda a cuidar a su pequeña bebé después de que la primera n...