[Colavoracion Parte 1] Hooky Will x Damien

mi principe azul

Hacía unos 10 meses que la guerra había acabado, todo estaba en aparente normalidad. Digo aparente porque los reyes no eran exactamente sinceros con el pueblo.

A la vista de muchos, eran un matrimonio normal y feliz, pero al darse la vuelta, entrar al castillo y quitarse los anillos de boda, iban con sus amantes.

Los hermanos brujos [o los hermanos rompehogares, jeje], ambos sabían que eran amantes de los reyes, pero poca gente lo sabía con certeza.

Solo ellos, la familia y gente muy cercana [bueno, no toda, porque Dani no se entera de nada. Es muy inocente y despistada como para siquiera pensarlo. Sabe que Mónica y Dorian se gustan y que se han besado, pero no sabe que son amantes, y mucho menos sabe lo de su hermano mayor y el rey. Pero en realidad, ni a Mónica se le pasa por la cabeza, no sé por qué].

Así que los reyes tienen que ir cuidando sus pasos, ya que el rumor ya existe; solo hace falta que se confirme de una u otra forma.

Bueno, y así son las vidas de la reina, un profesor, un consejero y del rey. A pesar de que todos corren peligro si los atrapan, se nota que poco les importa. No disimulan muy bien; al menos los reyes no disimulan en público [y bueno... en privado ya ni tienen que "disimular"], porque a eso yo no lo llamo disimular.

Ese día, Damien y Will tenían una "reunión" en otro reino [ejem, ejem, sí, "reunión". Will le ha mentido a todo el mundo, incluso a su amante/pareja sobre ese viaje de "negocios"]. El reino donde iban estaba lejos, lo suficiente para que no los conocieran si no mencionaban que Will era rey y Damien su consejero. Todo estaría bien.

Esos últimos días habían estado hasta arriba de trabajo y Damien no sabía ni en qué día vivía de lo atareado que estaba. Viajar para trabajar aún más no le entusiasmaba, pero era su trabajo. Además, tampoco estaría tan mal; estaría con el rey, su amante. Lo que él no sabía es que no era un viaje de trabajo, pero aquí venían problemas para la "escapada" de estos dos tortolitos.

El mismo día celebraban 11 meses del casamiento de los reyes, pero Will no lo recordó, y Damien estaba medio muerto a ese punto. Mónica también tenía planes con su amante, pero ella no estaba enterada del viaje de negocios, lo cual la hará enfadar con Will, ya que no le había dicho nada. Pero antes, en el castillo, Damien acababa de guardar todo en la mochila.

Will: toc toc toc

Damien: Adelante -el rey entra y lo abraza por la cintura, susurrándole en la oreja-

Will: Hola cariño, ¿ya lo tienes todo?

Damien: ¡Joder, qué susto, Will! Y sí, ya está casi todo.

Will: Perfecto.

Damien: ¿Y quieres dejar de llamarme así? Al final van a atraparnos, y es que es fácil hacerlo. No sé cómo no lo han hecho ya.

Will: Qué mono estás cuando te asustas, ven aquí anda -le da vuelta a Damien y empieza a besarlo. La puerta estaba cerrada y Damien no pudo resistirse-

Damien: Es muy convincente, ¿lo sabía, su majestad?

Will: Jajaja, déjate de tonterías.

Damien: Jajaja, está bien.

Will: ¿Sabes lo que quiero, verdad?

Damien: No, no, no, no.

Will: Síii, venga, hazlo por mí, ¿vale cariño?

Damien: ¿Quieres parar, amor? -lo dice en tono sarcástico-

Will: Vale, vale, tú ganas esta ronda. A la próxima no me dejaré caer tan fácilmente.