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La silueta de una persona se acercaba y, cuando se detuvo para observarla mejor, pudo notar que, efectivamente, era una chica la cual, en apariencia, lucia bastante joven, de al menos unos 20 o 21 años, quizás 22 como mucho.

Lo más que se acercaba a él, sin notar la presencia del muchacho entre los árboles, lo mejor que él podía verla:

Tenia unos ojos ligeramente pequeños, pero lo suficientemente redondos como para que sean bonitos, unas mejillas lindas, las cuales lucian como las de un pequeño hamster. Una piel algo pálida, ligeramente lechosa, con pequeñas pizcas rosas en sus mejillas y orejas, probablemente debido al frío que hacía aquella noche, de todos modos ya era mediados de Otoño, así que tenia mucho sentido.

Jinhwan estaba tan distraido con el solo aroma de la muchacha que ni siquiera se detuvo a pensar qué hacia la joven fuera a estas horas de la madrugada ya que, si lo pensabas, era efectivamente bastante extraño, demasiado de hecho.
Pero el joven estaba tan estancado con la esencia de aquella chica que simplemente no podia pensar con claridad.

Fue así como el joven Kim estuvo unos segundos pensando en algo diferente:
Cómo acercarse a la joven.

Realmente no habian muchas opciones.

1. Seguirla de cerca hasta que pueda encontrar el momento en el cual poder emboscarla, aunque sería un poco difícil si la muchacha se giraba por cualquier motivo y lograba verlo.

2. Simplemente derribarla y llevarla a un lugar oscuro o poco frecuentado, así como un callejón o algo, pero Jinhwan no se sentía tan maliciosamente cruel para aquel momento.

O, la última opción en la que podía pensar.

3. Tratar de tener una leve conversación 'casual' con la joven, así poder ganarse su confianza, para entonces tan solo... Acabar con su vida.

La única que parecía razonable ante los ojos del muchacho era la última opción, por lo que decidió iniciar por allí.

...

Había encontrado a la víctima perfecta para esa noche: su belleza era innegable, su aura la hacía parecer una obra de arte, su sangre lo llamaba, el olor era fuerte...

Él caminaba hacia ella a un ritmo normal, mientras ella tenía la vista fija en el suelo, probablemente sin saber lo que estaba por pasar... Él pensó en todas las cosas que podría hacerle mientras se acercaba a ella, pensando qué haría que su sangre tuviera un sabor más dulce.

...

Él ya estaba a unos metros. Comenzaba a respirar pesadamente, él ya no podía contenerse, iba a disfrutar esta noche como si no hubiera un mañana... sus manos comenzaron a sudar un poco mientras la sed de sangre se apoderaba de él, había estado esperando a una persona así durante mucho tiempo...

El joven Kim estaba tan cerca de ella ahora, su hambre se volvía cada vez más incontrolable, pero tenía que tomarlo con calma, disfrutar cada paso y sacar el máximo provecho de esta noche.

Vió que ella estaba a punto de llegar a un cruce, en ese mismo momento se acercó a ella, sacando las manos de sus bolsillos y mostrando la sonrisa más encantadora que pudo lograr, el olor de su sangre estaba justo ahí, así de cerca...

Se acercó a ella y habló con la voz más encantadora que una persona podría tener mientras, en ese mismo instante, Jinhwan se dispuso a actuar como la persona más perfecta que podía.

"Disculpe señorita... ¿conoce el camino a la estación de metro más cercana? Realmente agradecería su ayuda..."

"for the taste of you" Kim JinhwanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora