19 de Septiembre de 2014.
Era Martes, las clases terminaron, todos los estudiantes estaban saliendo de aquel Colegio, Dayana venía con sus amigas hablando normalmente.
━Dayana, ¿Vas a hacer fiesta por tu Cumpleaños?━Preguntó de repente una de sus amigas, Lucía.
━No, chicas, saben que no me gustan las fiestas, además tengo que ir a trabajar.
━Está bien, te entendemos.
━Si, gracias.
━Bueno, lo siento pero me tengo que ir, Cuídate, bye. ━Se despidió Karla mientras le daba un abrazo a Dayana.
━Adiós Dayi.Sus amigas se fueron, cada una para su casa mientras que Dayana se dirigió al establecimiento donde solía ir a trabajar, no alcanzó a cambiarse, su casa quedaba más lejos de lo que estaba su trabajo, así que se fue en uniforme para el almacén.
Al entrar allí notó que el ambiente estaba tenso, pero decidió ignorar eso y mejor se dirigió a la Caja donde pagaban todos los clientes sus compras.
━¡Dayana!━La llamó su jefa mientras se acercaba con un hombre apróximadamente de unos 24 años.
━¿Si...? Dígame.
━Te presento a Five, él es nuevo y va a trabajar contigo a partir de hoy, en un rato les daré los turnos.━ Dijo y se fue para su oficina.
━Amm...Mucho gusto, soy Dayana.━Le dijo ella al joven de los ojos verdes.
━Five.━Le contestó él, fríamente mirándola de arriba a abajo.
Esa situación fue muy incomoda para la pelinegra, Five lo noto y se fue a su puesto de trabajo, Aquella adolescente decidió ignorar y seguir trabajando mientras el joven estaba en los pasillos organizando los productos.
El tiempo pasaba muy rápido ya eran las 8:30 de la noche, el turno de Dayana había terminado, tomó sus cosas y salió del almacén, todavía sintiendo la mirada de aquel joven.
Aquella cuadra era un poco peligrosa, sin embargo, la adolescente caminaba tranquilamente hasta que unas cuadras después llegaría a su casa.
Abrió la puerta de su casa y al entrar todo estaba oscuro así que ella buscó el interruptor pero en ese momento sintió como alguien la abrazo por detrás, ella se tenso demasiado.━Adivina quién soy...━Le susurró una voz de hombre en su oído a lo que ella la reconoció de inmediato, era la voz de su novio, Harold.
━¡Amor! No hagas eso, me asustas...━Dijo Dayana con una pequeña risa.
Él prendió la luz sin soltar a la chica mientras le daba un bonito ramo de flores.
━Feliz Cumpleaños mi princesa bonita.━Hay...Gracias, que lindo.
━¿Si te gustó?
━¡Me encantó!━Dijo ella mientras le daba un beso a su novio.
En resumen, Esa fue una de las mejores noches de toda su vida.
Cuando eran aproximadamente las 4:30 de la mañana, la mamá de Dayana llegó tomada a la casa mientras comenzó a golpear fuertemente la puerta.
━¡Abreme Dayana!, ¡Abre ahora maldita!
Dayana y Harold se asustaron, los dos se encontraban en la cama, la adolescente se levantó y rápidamente se colocó algunas prendas de ropa y encima una bata que le cubría su cuerpo hasta las rodillas para que su madre no sospechara de nada.
━Ya vuelvo, quédate en silencio━Le dijo ella a su novio.
Dayana bajó rápidamente las escaleras y le abrió la puerta a su mamá.
━¿Qué son estás horas de llegar? Mamá, ¡Por Dios!
━Hay...Tú...Tú no me digas Nada, no tienes ningún derecho.━Le dijo su madre extremadamente borracha mientras Dayana cerraba la puerta.
━Mamá, ¿No ves qué andar en la calle a estás horas es peligroso? Aún es de noche.
━Yo lo sé, no soy una niñita como tú y ya lárgate a dormir.
━Cierto, hasta luego mamá.
Ella sabía perfectamente que desde que su padre murió, su mamá se había convertido en una mujer completamente diferente, se había vuelto alcohólica, ignorante, gritona, drogadicta, etc.
Dayana subió a su habitación y cerro la puerta con seguro mientras se acostaba en su cama junto con su novio, le dió la espalda, no quería hablar, así que él lo entiendo y solo la abrazo, así durmieron hasta que la alarma sonó.
Los días transcurrieron normalmente, la misma rutina los cinco días de la semana, Harold, bueno, él trabajaba, era conductor de bus Inter municipal.
Dayana se dedicaba a estudiar y a trabajar, pero cuando llegaba al trabajo en las tardes sentía la mirada de Five sobre ella, haciéndola sentir molesta y a la vez incomoda, esta situación se repetía todos los días, ella ya estaba cansada, no tenía el valor de ir a decirle que era lo que tenía ella para que se la pasará mirándola.
Algo que le llamaba la atención a Dayana era las pocas manchas de Sangre que siempre veía en la ropa de Five, era algo extraño ya que los productos que él organizaba en los estantes no era nada sangriento ni mucho menos animales.