08

253 31 4
                                    

Me toma dos horas leer dos páginas. Dos. Páginas. Bueno, la verdad es que sólo le eché un vistazo,pero ya no me acuerdo de nada. Tomonotas sobre cosas que parecen importantes, pero podría también estar escribiendo una corriente de consciencia. Estoy muy ocupado por la forma en como escribe muy rápido en su teclado y la manera como inclina la cabeza hacia un lado cada vez que parece que está pensando en algo y también cuando entrecierra un poco los ojos cada vez que lee. Nuestros pies se siguen tocando debajo de la mesa y seguimos pidiendo disculpas el uno al otro, pero sigue sucediendo. Lo juro, no es mi culpa.

Hyunjin cierra su computadora y extiende los brazos, sus hombros emergiendo.

—¿Quieres tomar un descanso y comer algo? —dice.

—Sí, seguro. —Todavía sigo lleno por mi desayuno, pero no hay razón para seguir leyendo si nada se va a quedar en mi cerebro. Como que lamento que se haya sentado conmigo. Pero no puedo culparlo por mi falta de concentración cuando está a mí alrededor.

Caminamos hasta la cafetería y Hyunjin ordena un café y un bagel.

—¿Qué quieres? —¿Va a pedir para mí y pagar? No puedo hacer eso.

—Oh, no tienes que hacer eso. Tengo dinero —le digo mientras la barista de aspecto aburrido espera por mi orden. También está mascando chicle y lo hace estallar. Agh. ¿No es contra las reglas comer goma de marcar en un establecimiento donde venden comida?

—Estoy seguro de que tienes dinero, pero yo me encargo. ¿Qué quieres? —La sonrisa dulce de Hyunjin es mi perdición. Pido una rebanada de pan de banana y un batido de calabaza.

—Gracias. Ahora yo te debo —le digo.

—No, no lo haces. Esto paga por ayudarme con Mark. —Ah, claro. Casi me había olvidado de él. Nos movemos hacia un lado para esperar por nuestras bebidas.

—¿Cómo esta él?

—Recuperado. Ese hijo de puta puede beber como una esponja y estar bien al día siguiente. Yo me tomo dos cervezas y quedo destrozado durante todo el fin de semana.

—Sí, se lo que quieres decir. —La chica aburrida ni siquiera llama por nuestras órdenes, simplemente las empuja hacia nosotros.

—¿Todo lo que estabas pasando anoche resulto bien? —pregunta.

—Más o menos. —He recibido varios mensajes de textos de disculpas de parte de mis otros amigos. Después de lidiar con Chan, lo único que quiero hacer es terminar con eso.

Tomamos nuestros pedidos y nos dirigimos a la única mesa libre. El café está lleno, incluso para un sábado, y me doy cuenta que debe ser por algún tipo de evento deportivo. A veces pienso que debería participar más en ese tipo de cosas, pero entonces recuerdo como se siente mi trasero después de estar sentado en los asientos de metal de las gradas durante dos horas.

—Lo siento por los nachos —le digo.

—Oh, no es gran cosa. Mark se comió todo lo que había en el sartén en medio de la noche. O espero que así haya sido. Encontré el recipiente vacío esta mañana y a menos que tengamos fantasmas come nachos...

Eso suena terrorífico.

—Bueno, hola ahí. —Una voz que conozco muy bien dice detrás de mí.

Me doy la vuelta y miro a Chan por lo que Hyunjin no puede verlo.

Antes de que pueda preguntarle qué demonios está haciendo aquí, habla.

—Necesitaba un estimulante antes de mi sesión de estudio. —Con frecuencia tiene sesiones de estudio con unos gigantescos libros de letra impresa súper pequeña. Se quedara ciego para cuando llegue a los treinta, lo juro.

For Real || Hyunlix✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora