Butterfly Effect 𐦍 KM

🦋 21: El Arrepentimiento Que Llegó Tarde.

Jungkook ingresó a su casa para dirigirse a la habitación que su padre había acondicionado para su hermano mayor. Al inicio, cuando decidió sacarlo del hospital y hasta contratar enfermeras para cuidarlo, había creído que estaba siendo paranoico, ahora que Jimin le había contado todo, sabía que Baekho sólo estaba tratando de evitar otra catástrofe. Aunque no tenía cabeza para pensar en eso, tenía muchos otros problemas, y todos ellos se derivaban exactamente del mismo suceso. Por eso cuando entró a la habitación de Taehyung y vio a su progenitor sentado mirando al alfa del medio con una expresión de derrota, no hizo esperar la pregunta:

—¿De verdad mataste a Park Minrae?

Su padre alzó la mirada como si le pesara la cabeza y apretó los labios al verlo, parecía cansado del tema.

—Jungkook, espero que Jihyun ya se lo haya dicho a ese noviecito tuyo, pero los problemas que hayan ocurrido entre los lobos de nuestra generación, no tienen nada que ver con ustedes, olvídalo —pidió.

El menor sintió su sangre hervir.

—¡¿Qué no tienen que ver con nosotros?! ¿Por culpa de quien los clanes están divididos? Tuve la maldita mala suerte de que me tocó un destinado en el clan contrario, al que no me puedo acercar porque a mi padre se le ocurrió la brillante idea matar a su madre sólo porque no fue capaz de controlar su maldita calentura —gruñó acercándose al hombre y tomándolo de la camisa. —¡Estoy harto de secretos! ¡Harto de mentiras! Me importa poco que me hayas dejado en la cárcel, lo que me molesta es que aunque haya salido sigues destruyendo mi vida —siguió diciendo. —Sólo dime, ¿de verdad la mataste? ¿Es lo único que has hecho tú?

El hombre miraba a su hijo sin intenciones de alzar la voz, en realidad ya estaba cansado de lo mismo y las cosas estaban mal, muy mal.

—Si te refieres a lo del orfanato y a lo que le sucedió a Park Jihyun recientemente, yo no hice nada de eso, sólo le quite la vida a Park Minrae porque fui con cobarde que no pudo enfrentar ese problema —admitió con voz cansina.

Jungkook apretó el agarré en su ropa, tembloroso.

—¿Sabes lo que causaste al fracturar la relación entre los clanes de esa forma? —cuestionó con los ojos llenos de lágrimas. —Hiciste que Jimin me ocultara que mientras yo estaba en la maldita prisión, él dio a luz un hijo mío —le soltó como una bomba qué hizo al mayor abrir los ojos de par en par. —¿Por qué crees que no me lo dijo hasta que yo me enteré por accidente? Sabiendo lo que le había pasado a su madre, ¿qué le podría esperar a él? Estuvo solo, sufrió solo, quien sabe cuanto dolor pudo haber tenido, quien sabe lo difícil que habrá sido para él.

» Mi cachorro no conoce a su otro padre porque un hombre cobarde como tú decidió acabar con el problema matando a esa mujer, y encima de todo me dices a mi que soy un asesino por defender a mi omega de un maldito alfa violador, ¡¿TE PARECE BIEN ESO, HIPÓCRITA?! ¡CONTÉSTAME!

Baekho temblaba bajo el tacto furioso de las manos de su hijo. ¿Tenía un nieto? Ahora comprendía las miradas aterrorizadas de Jimin, el odio que había en su mirada. Ahora lo comprendía todo. Incluso le había extrañado que realmente ese omega se hubiera desaparecido cuando Jungkook estuvo en la cárcel, por sus hijos mayores sabía que no lo había intentado ver más que aquella vez que se despidieron.

Ahora lo entendía todo.

—L-los omegas necesitan a su alfa mientras están en cinta... —balbuceó apenas audible el hombre, tomando las manos de su hijo porque el agarre en su camisa era demasiado asfixiante.

Jungkook rompió en llanto al escucharlo, se apartó cubriendo su rostro con las manos porque por más que pudiera tratar de odiar a Jimin, sabía que no podía hacerlo. Todo estaba en su contra, todo siempre estuvo mal en su relación, ese amor nunca debió ocurrir, por eso las cosas se habían dado así. La fragilidad de todo fue la que orilló a todos a vivir atrapados en esa mentira, la que obligó al amor de su vida a ocultarle la existencia de su cachorro por temor a que algo terrible pudiera pasar con él.