Avery, el más joven de la boyband tokio hotel, el chico apodado como el príncipe de la banda por su belleza inigualable y encantadora personalidad, resaltando también al tener un estilo diferente al del que representa la banda, es el encargado de co...
Luego de ser regañado y llorar como un niño chiquito frente a su representante, se despidió de los chicos y su tío avía ido a recogerlo en su auto.
— Vi el periódico hoy, se que no te gustan las chicas Ron, ¿Por qué dijiste eso? Ya sabes como son los medios, si no te sabes defender bien, te comerán vivo, tienes que ser más inteligente, ya tienes dieciséis — Avía visto los ojos rojos del adolescente, y, por más que quiciera simplemente consolarlo, el chico se comportaba como un niño mimado y debía aprender.
— ¿Tú también? no es mi culpa que esa mujer sea una serpiente — Sonrió irónico, savia que el adulto solo estaba preocupado, pero odiaba que le sacaran las cosas en cara, claro, si después de todo, por tan encantador que fuese, seguía comportándose como un crío sin remedio.
Y el viaje camino a casa se mantuvo en silencio después de eso, y es que por más que el hombre uviece estudiado psicología gracias a su carrera, aveces simplemente no podía entender a su sobrino.
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Ya en casa, la alegría volvía al cuerpo de Avery con solo ver la sonrisa de su querido hermanito y recibir un abrazo del mismo.
— ¡Ron! ¡Estas aquí! ¡Estas aquí! — El niño saltaba de la emoción y alegría. —¡Te vi en televisión! ¿Es sierto que te gusta Amairi? Mmh no importa ¡¿Cómo es estar hay?! ¡Dime Dime Dime! — El pequeño hablaba tan rápido y alegre que el adolescente solo podía sonreír y explicar con calma su experiencia en el programa sentados sobre el sofá, vio como la señora que cuidaba de su hermanito hablaba con su tío, parecían despedirse.
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Avía pasado la tarde jugando y hablando con su hermanito, ahora, en su habitación, teniendo a su gatita Rosie como unica compañía, buscaba entonar en su guitarra alguna melodía que le gustase. — Y yo, Me tragaré mi orgullo... — La inspiración surgió atravez de la melodía de su preciada guitarra y las palabras salieron de él como si ya fuera una canción escrita. — A ti es a quien amo y por eso estoy diciendo adiós. — tarareo junto al sonar de su guitarra, anotando sus versos en aquel cuaderno con portada oscura que lo avía acompañado por tantos años.
Un tierno maullido le hizo prestar atención a su gatita, la cual se restregaba en el en busca de atención. — ¿Te gusta Rosie? — La bella gatita maullo nuevamente y la sonrisa en él de cabellos chocolate no se hizo esperar apenas tomó a la pequeña animal en brazos hasta ponerla en su regazo luego de hacer el instrumento a un lado, Acarició el suave pelaje y miro su ventana abierta, las estrellas parecían saludarle con esa fresca brisa que entraba al cuarto y, sintiendose tan dichoso por la calma brindada, otra vez la inspiración surgió de él en forma de palabras — Míralas, iluminando a todos con su esplendor, así como tu iluminas mi mundo entero con tu belleza, por qué será que cuando las veo a ellas me acuerdo de ti, aunque ya no estes aquí... — cerro sus ojos disfrutando de tal tranquilidad, sentía que podría quedarse así mil años tan solo él con su cuaderno y guitarra en compañía de su hermosa felina en la comodidad de su cuarto, y entonces, la imagen de ciertos gemelos hizo su sonrisa ensanchar , porque si, en ellos nunca dejaba de pensar.
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El adolescente despertaba en medio de un campo de flores de todo tipo, estaba confundido no sabia que hacía hay y tampoco recordaba que su cabello fuera tan largo y brillante, camino entre rosales que, sorpresivamente, no tenían espinas. — Ron — Escucho la voz de su hermanito llamarlo, pero no entendía de donde provenía la voz — Ron, Ron por favor, hermano despierta. — Un sollozo acompañaba aquellas súplicas, y entendió que esta no era más que el mundo de los sueños, y aquel descubrimiento le hizo despertar.
Al abrir sus ojos se encontró con la carita del niño deformada en llanto frente a su cama y, de inmediato, tomó al pequeño y lo subió con el a la cama. — Hermano, hermano por favor ayúdame ell–os qui–quieren matarme. — Otra vez aquellas pesadillas, ya no soportaba ver al niño así, si tan solo pudiese intercambiar sus sueños con los del pequeño entonces le evitaría tal sufrimiento.
— Shuu shu, todo estará bien mi niño, yo te protegeré, aquí ellos no pueden alcanzarte — Arrullo al niño entre sus brazos, acariciando suavemente sus rizos y dándole palabras de consuelo al oído.
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Hay no, si me dio pena el nene René, el no se merece tener esas pesadillas, pero bueno, es parte de su personalidad.
Por otro lado Cuando Avery se encontraba cantando Las 2 primeras frases son pertenecientes a la canción "A GreatBigWorl &" de Cristina Aguilera lo demas es mío, bien, no sé si en la noche o mañana actualizo pero se viene por fin más interacción con la banda, me avía querido centrar en Avery, pero no soy buena con esto así que, pido disculpas, bueno hermosa personita aquí me despido bey 》°》☆*•
