ℍ𝕖𝕣𝕞𝕠𝕤𝕠 𝕋𝕠𝕣𝕞𝕖𝕟𝕥𝕠 (Kookv)

27

Sobre sus manos estaban aquellos documentos y frente a ella se encontraba Amira con Jungkook observándola con gracia.

La rubia jalaba sus cabellos y se veía desesperada, sin escapatoria.

—¿Crees que te podrás deshacer de mi tan facil?

—Ya lo hice — respondió simple.

—Ni en sueños Jungkook, tu me perteneces, siempre será así.

—Se acabó Eunji, ya no podrás manipular a nadie más.

—Esa idiota buena para nada, sabía que no era buena idea confiar en ella, perdí tantos años.

—No hables así de mi hermana, la única culpable aquí eres tú, la manipulaste y te aprovechaste de sus sentimientos, eres una infeliz, pero todo cae por su propio peso y tu acabas de hacerlo.

—No me hagas reír, esto solo piensa que no estamos casados, pero ¿Que hay de nuestro hijo? — habló desesperada.

Jungkook solo pudo reír por las palabras de la rubia, no podía creer que seguiría mintiendo aún al verse atrapada.

—Eunji — llamó Amira — si crees que el tribunal va a creerte un posble embarazo estás muy equivocada, todos están al tanto de tu engaño, falcificaste documentos, tu y tu abogado están en graves problemas.

—No tienen como probar nada.

—De hecho si, fuiste bastante idiota al dejar que mi hermana tuviera todas esa pruebas, esos mensajes, ahora ella misma fue la que nos dió la verdad y te hizo caer.

— Nunca debí confiar en ella.

—Te equivocas, en quien no se puede confiar es en ti.
Ahora deja de fingir demencia y acepta tus errores, mañana por la tarde tienes la audiencia, espero que sepas lo que seguirá después.

—¿De que hablas?

—Iras a al cárcel, es lo mínimo que puede pasar contigo.

—Eso jamás Jungkook, jamás me quitaran mi libertad.

—Bien, eso lo determinará el juez, por ahora no tenemos más que decirte.

Amira y Jungkook se dieron la media vuelta y salieron del lugar sin importarle escuchar los gritos de frustración y las maldiciones que están soltando la chica a sus espaldas.

— Llegaste bien tarde cariñito — dijo Hobi mientras entraban a su salón de clases— espero que haya valido la pena.

— Lo hizo, pero no de la forma en que piensas.

Vieron llegar a Jisso junto a ellos, se veía algo tímida.

—Hola Tae...

—Hola Ji ¿Cómo estás?¿Pudiste dormir?

Taehyung era muy dulce para su pobre corazón, necesitaba a su amigo de vuelta y haría lo posible por qué eso sucediera, solo que está vez cada cosa que haga sería de forma correcta.

—A mi nombre engañas mosca — dijo sin más Hobi hacia la chica.

—Hobi...

—Ya se bebé, solo soy precavido.

—Tienes razón en desconfiar, fui una mala persona, pero estoy tratando de enmendar mis errores.

— Siéntate Jisoo...

La pelinegra hizo lo pedido, dejando su bandeja junto a la de Hobi y tomando temerosa un lugar allí.

Los observó con una pequeña sonrisa y luego en silencio comenzó a comer su comida, evitando interferir en la rutina que tenían aquellos dos, sin querer ser una molestia.