The True Heir

capitulo 7

Si, así es, no me he olvidado de la historia que lo comenzó todo. 🥹

Lo prometido es deuda y he aquí un nuevo capítulo, lamento haber tardado tanto.

Habrá un salto del tiempo de unos 10 años

Edades de los niños

Daenerys y Aemond: 10
Helaena: 9
Baela y Rhaena : 7
Baelon: 6
Aemma y Rhaenys: 5
Visenya: 3

Capitulo 7

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La vida en Dragonstone fluía con una armonía que parecía haber sido esculpida por los mismos dioses. Cada rincón de la fortaleza resonaba con la risa de los niños, el crujir de las antorchas y el susurro del viento que acariciaba las altas murallas de piedra. Rhaenyra contemplaba con gratitud y asombro la familia que había construido junto a Laena, su fiel compañera y esposa.

Los días comenzaban con la alegría de los niños, que corrían por los patios y jardines, desbordando energía y vitalidad.

Daenerys y Aemond, los primeros en llegar, habían heredado la astucia y el coraje de sus padres, manifestándose en sus gestos y miradas llenas de determinación.

Helaena, la niña de cabellos plateados y ojos amatistas, irradiaba una serenidad que parecía abrazar a quienes la rodeaban, convirtiéndose en un faro de luz en la oscuridad para Rhaenyra.

Baela y Rhaena, las gemelas rebeldes, desafiaban constantemente las normas establecidas, explorando cada rincón de la isla con una curiosidad insaciable. Su risa resonaba en los pasillos como el eco de la libertad, recordándole a Rhaenyra la importancia de seguir los impulsos del corazón.

El pequeño Baelon, con su cabello oscuro y su mirada intensa, mostraba una determinación que no conocía límites. Cada día se esforzaba por emular a su madre Rhaenyra y su abuela Rhaenys, entrenando con espada y escudo para convertirse en un formidable guerrero que protegería a su familia.

Aemma y Rhaenys, las gemelas de corazón valiente, no se quedaban atrás, desafiando los obstáculos con una determinación que sorprendía incluso a los más escépticos. Con cada paso, demostraban que la fuerza y el coraje no conocían género ni límites, forjando su propio camino en un mundo dominado por hombres.

Y luego estaba Visenya, la réplica exacta de Rhaenyra, cuya llegada al mundo había sido recibida con un alboroto de alegría y celebración. Con su mirada penetrante y su espíritu indomable, se ganó el respeto y la admiración de todos, convirtiéndose en la protegida de Laena y el orgullo de su familia.

Pero no solo eran los niños quienes llenaban Dragonstone con su presencia. Los dragones, fieles compañeros, también formaban parte de la vida cotidiana en la isla. Syrax y Vhagar, Vermithor, Silverwing y cannibal, los más antiguos y poderosos, surcaban los cielos con gracia y majestuosidad, los últimos años Syrax había logrado igualar el tamaño de Vermithor, descubrieron que los dragones crecían aún más su se encontraban en libertad.

A los dragones mayores les seguian de cerca los dragones de sus hijos, Rhaegal, Gaelithox, Dreamfyre, Moondancer, Morning, Stormfyre, Brightfyre, Bloodfyre y Sunfyre.

Y así, en medio de la paz y la prosperidad, Rhaenyra se preparaba para enfrentar los desafíos que se avecinaban en el horizonte.

Con su familia a su lado y el poder de los dragones bajo su mando, estaba lista para terminar lo que Aegon comenzó, unificar los siete reinos bajo su liderazgo y prepararlo para la próxima amenaza que vendrá del Norte.