Después de todo el espectáculo que ocurrió en mi llegada a París se hizo de noche y decidí ir a mi casa, estaba ordenando cajas que me iban llegando pero alguien se chocó con la ventana del balcón y quedo con la cara aplastada en el cristal.
-oye el cristal me lo vas a limpiar tu ahora- dije mientras abría la ventana y el gato negro se sobaba la cara en el suelo.
-lo siento creo que no apunté bien con el palo- lo señaló, el palo estaba tirado a su lado.
-ya me di cuanta bobo - iba a cerrar la ventana pero me lo impidió poniendo su pie en medio.
-¿que quieres ahora?- estaba indignada osea ¿me querría robar o algo? Ni loca pensaba abrir más la ventana.
-¿no tendrías un cacho de camemberg de casualidad? - el chico estaba apenado y su anillo empezó a sonar.
-me acaba de mudar cómo voy a tener camemberg- el gato me miraba con unos ojitos y no pude resistirme.
-agh voy a mirar si mi compañera tiene algo-
-¿compañera? ¿Tienes una compañera de piso?- yo estaba yendo a la puerta de mi habitación pero me giré y vi que estaba entrando a mi cuarto sin mi permiso.
- pues claro, espera por qué entras-
- me queda un mituto para transformarme no me puede ver nadie-
- y que haces aquí - en serio no entendía por qué estaba en mi habitación.
- ya te contaré pero corre a por el queso porfa- dijo preocupado mirando su anillo. Fui a la nevera y no me esperaba que hubiera camemberg ahí, lo cogí y me dio un pestazo horrible, huele como los pies de mi padre después de trabajar.
- ay mierda, ¡plagg! - escuche a chatnoir maldecir y supuse que se había transformado. Una cosa negra estaba volando hacia mi y me asuste porque no vi bien y pensaba que era una cucaracha voladora así que empecé a intentar darle golpes con la mano o atraparla con un bote pero la cucaracha siempre se salía con la suya.
- eh cuidado es mi kwami- dijo a través de la puerta de mi habitación.
-¿tu qué? -
-mi kwami, es lo que me da mis poderes- al final le di el camemberg y la cucaracha volvió a mi habitación chatnoir me abrió la puerta.
- ya puede pasar princesa camemberg- me estaba haciendo una reverencia muy graciosa.
-me vuelves a llamar así y te quedas sin genitales- lo amenacé apuntándolo con el dedo y me fije en como tragaba fuerte.
-entonces dime tu nombre- de forma arrogante, que insoportable.
-si claro le diré mi nombre a un murciélago sin alas que acaba de conocer, se te va la olla-
-eh como que murciélago sin alas esta claro que soy un gato negro-me enseñaba sus orejas de gato y su cola dando una vuelta sobre sí mismo.
- ¿no deberías estar en tu casa? - pregunte con bastante curiosidad y más al ver como cambiaba de cara cuando le hice la pregunta, chatnoir se tomó la libertad de sentarse cabizbajo en el borde de mi cama.
- las cosas están complicadas ahí- ¿a que se refería? ¿Tendrá problemas familiares o algo parecido?.
-oh gatito- no podía hacer nada pero me senté junto a él y le acaricié la espalda, me pareció ver una leve sonrisa agradeciéndome el gesto, nos quedamos un buen rato en silencio escuchando el sonido de los grillos que se colaba por la ventana, me gustaba estar así, ya que aunque nos acabamos de conocer era cómodo.
-¿por que tienes una bandera de España garabateada?- rompió el silencio y me miro, me di cuenta de lo cerca que estábamos pues nuestros brazos se chocaban, me separé un poco.
-no está garabateada, son firmas de mis amigos, nací allí, soy española-
- cuantas firmas- volvió a mirar la bandera y se fijo específicamente en una que decía claramente chatnoir, era la de mi mejor amiga.
- sabes... Antes de venir aquí pensaba que todo ese rollo de los villanos y superhéroes era un invento del gobierno-
-¿en España no hay superhéroes?- pregunto como si España fuera el país más raro del mundo por no tenerlos.
- que va, España es un país bastante aburrido en cuanto a eso-
-y por qué ahí pone mi nombre- señaló la firma de mi mejor amiga.
-desde que hice la audición para entrar al instituto de arte mis amigas buscaron noticias de París y se encontraron contigo- la calma que había entre nosotros era increíblemente relajante.
-vaya- ChatNoir se quedó pensativo mirando la bandera, seguimos hablando de todo y de nada ya que él era un superhéroe con una identidad secreta y si revelaba mucho sobre su vida civil podría saber quien se esconde detrás de esa máscara, me ayudó a colocar las cajas y encontró mi caja de discos.
- Ala tienes mucha variedad, yo solo tengo música clásica y aburrida- dijo cogiendo en mano un CD de Olivia Rodrigo, otro de Trueno y otro de Miranda! .
-¿quieres escuchar alguno?- le pregunte enseñándole un reproductor que me había llegado en otra caja.
-vale, el que tu quieras, no, mejor pon tu favorito- dijo con una chispa en los ojos y rebusqué un poco y cogí 1989 de Taylor Swift lo coloqué en el reproductor y seguimos con la mudanza durante toda la noche. cuando le noté muy cansado mire la hora y eran las 3am paré la música.
-Será mejor que descansemos si no mañana vas a estar muy cansado como para salvar Paris querido batman- dije con gracia, pero a cambio recibí una mirada fulminante.
-Pues si yo soy Batman tu serás Robin- dijo sentándose en el suelo al lado de mi cama
-Robin es un tio- me intenté defender.
-Pues te cambias el género- ya estábamos delirando.
-buenas noches gatito- y sin más que decir apagué la luz y los dos nos acostamos, Chat en el suelo y yo en la cama, me dio un poco de pena pero sentía que si insistía en que durmiera conmigo no se iba a dejar así que no le molesté, a veces era como un gato arisco.
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buenas mi gente
que os está pareciendo esta historia?
tengo muchas ideas en mi mente pero no se como enlazarlas así que probablemente tarde en actualizar pero no os preocupéis.
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Un gatito en mi balcón | ChatNoir x Tn
Fanfictionno se escribir con la rayis pero la prota se llamara Naiara (le podeis cambiar el nombre).