❝ Como lazos en tu pelo, mi estómago está hecho un nudo, tienes lo único que quiero. ❞
━━ Lacy.
ㅤㅤㅤ𝐘𝐄𝐓 ┇ Para Lisa, Rosanne era el significado de la perfección, la reencarnación de un ángel y a cada momento que ella la pasa con su mejor amiga, su...
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Prefacio.
¿Qué es la perfección?
Eso me lo pregunto todo el tiempo. ¿Qué es? Creo que cada quien ha desarrollado su propio término de lo que es la perfección, algunos dirán que es la belleza de determinada persona; otros irán por lo académico, argumentarán que la perfección es aquel que se de el lujo de sacar la máxima nota en todo; y unos serán más arriesgados y dirán que la perfección es aquel que tenga una buena actitud ante la vida.
Para mí, basados en todas esas creencias, la perfección se reencarna en mi mejor amiga. Sus cabellos rubios que combinan con su pálido tono de piel, sus ojos grandes e inocentes, su ingenioso sentido del humor y su gran carisma para desenvolverse en cualquier situación. ¡Maldita sea! ¡Hasta su maldito perfume!
Cuando eres amiga de alguien que encaja tan bien todo lo que es considerado "perfecto", tu vida se desmorona. Cada pedazo de ti, cada aliento que das, cada examen, cada escrito, dibujo, cada minúsculo paso, un movimiento, todo se siente tan insignificante a su lado, insuficiente sería la palabra.
La veo, como habla con nuestros amigos. Observo, callada y oculta a simple vista. Bajo mi cabeza, mi mirada se posa en mis manos y uñas que me había tomado tres horas en arreglar, mis ojos bailan como pequeñas bailarinas hasta llegar a sus manos donde no tenían un solo rastro de pintura pero se veían delicadas y mejor cuidadas. Todos dicen que son suaves y eso parecen.
He tocado sus manos y puedo reafirmar aquello.
Un nudo en la garganta. Todos mueven sus bocas, ya sea porque hablan o comen a nuestro alrededor. Ninguno de ellos es mi amigo. Solo la rubia que es el centro de todo.
Muerdo mi labio inferior y sin hacer mucho ruido me levanto. Apenas son las ocho de la mañana, y ya requería las palabras del único que parecía comprenderme; Taehyung.
Me dirijo hacia el baño, a pasos agigantados, pues la ventaja que tengo sobre otras personas son mis largas piernas. A duras penas logro entrar, trato de buscar aire, respirar.
Es como si alguien apretara mi garganta, tan fuerte que las palabras apenas pueden ser dichas entre pequeños y cortos susurros. ¿Qué es lo que me hace falta? Cuando estás a su lado: todo.
No solo es físico. No es que quiera ser como ella, pero a veces —la mayoría del tiempo— es como si al estar al lado de ella fuera una perdedora.
Busco recuperar el aliento, que aire fresco entre a mis pulmones, estoy en el baño con un nudo en la garganta. Sé que no es lo correcto, yo a ella la amo muchísimo, solo que no importa lo que diga o haga nunca seré lo suficientemente buena. Hasta en lo académico.
