Hyunjin y Félix habían roto, sin embargo el mayor no pudo contenerse al verlo de nuevo vestido así.
Contiene un poco de bdsm así que tu lectura es bajo tú mismo criterio.
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Hyunjin y Félix hablan sobre su relación y el cambio que daría al Hyunjin irse a Roma por sus estudios en arte.
Ambos se amaban a montones, se respetaban y apoyaban en todo. Siempre fue una relación muy sana y madura pues las "peleas" siempre eran habladas calmadamente y siempre había una solución rápida en ellas.
Se tenían demasiada confianza el uno al otro y sabían que ninguno tendría la locura para engañarse, sin embargo no se podían mentir y sabían que sería una vida demasiado diferente y por ende su relación no sería igual. Por lo que esa tarde, antes del vuelo de Hyunjin por la mañana estaban hablando sobre eso. Dándose su tiempo y razones.
-Hwang sabe que lo amo dasiado honey pero..- Felix tenia su mano derecha en la mejilla del pelirrojo acariciando y la otra acariciando la mano contraria para calmarlo.- es muy maduro y no puede hacer un berrinche por seguir con esto.- lágrimas salían de ambos pares de ojos, dándose a entender lo mucho que les dolía esto.- Es súper talentoso Hyung y no puede dejar la oportunidad de triunfar solo por mi, y yo tampoco seré egoísta al tenerlo a mi lado y privarle de esos logros que tendrá en el futuro. Lo amo y amare por siempre, aunque terminemos fue y será el mejor amor que he tenido Hwang. Así que por favor vaya a Roma y triunfe. Transfórmas en aún una mejor persona y ámame en el futuro si es que aún lo quiere.
Hyunjin entendía las palabras de Félix al decirle eso. El también deseaba una vida llena de éxito artístico y nuevas metas cumplidas. Pero también sabía que eso lo quería lograr junto a Félix. Pero no lo amarraría a su lado para que ninguno sea feliz en una relación a miles de kilómetros sabiendo que no era lo mismo. No sería lo mismo por la falta de presencia, la falta de tiempo del otro, su calor, voz, cuerpo y placer. Tenían una relación ya muy larga de cuatro años, y ahora con diesciocho era tiempo de alejarse por los estudios de ambos. Félix estudiaría en Standford en psicología y el en la academia de bellas artes de Brera en Roma, donde también vivían sus abuelos y le sería más fácil estar allá. Ambos se mudarían fuera de Seúl y como quiera seguirían alejados.
El pelirrojo solo podía llorar al pensar en cuanto extrañara a Félix, su voz, cara de Angel y su pelo rubio. Extrañaría todas las tardes que habían pasado en la sala del cuarto del menor junto a la ventana que daba hacía un pequeño río que pasaba por ahí. Extrañaría todas las noches que lo marco suyo y el placer que recibía. Los mimos que recibía la mañana siguiente y los postres del menor.
Sin intentarlo empezó a llorar aún más. Afferrando sus brazos en la espalda del menor abrazándolo fuerte y escondiendo su cara en su pecho. Félix lo imitó acurrucandolo en él y diciéndole todo lo que agradecía y como cambiaría esto.
Ambos habían acordado terminar en buenos términos su amor por el bien emocional de ambos. Los dos se habían visto crecer desde los trece que se conocieron en secundaria y desde los catorce como pareja ofícial.
