Capitulo 1: Él elfo, él guardián, él sol y la luna.

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"No quiero morir."

Esas tres terribles palabras, aquella suplica aterrorizada, fue lo primero que la niña dijo en su vida.

Era un trece de octubre, el aire era tibio y las aguas chocaban con fiereza contra el suelo en forma de gotas de lluvia, golpeando los techos de las casas y produciendo ruido al mismo tiempo. Fuertes truenos resonaron en el lugar, segundos después de que una chispeante luz cegadora iluminara los cielos por menos de medio segundo.

La niña pequeña se encontraba allí, acurrucada en el suelo. Sus cabellos rubios se pegaban a su frente por causa del sudor y una mueca de dolor se encontraba dibujada en su delicado rostro.

"Duele." Se quejó, sus ojos brillando en lágrimas.

Junto a ella se encontraba un niño unos años mayor que ella. Su cabellera de un precioso tono rubio, similar al color del oro, tan mojado como lo estaba el resto de su ropa. Sus ojos negros como dos piedras de ónix, brillando sorprendidos mientras miraba a la niña.

"Tranquila, Chiara." Él niño le dijo. La voz era suave, llena de preocupación. "Todo estará bien."

Los ojos de la niña, de un intenso color azul, lo miraron. El miedo inundaba su mirada.

"Todo está bien." Él niño, Jimin, le aseguró. "Namjoon llegará pronto."

Caín 'Bran' Theron era una niña huérfana de la que no se sabía quién era su padre, a pesar de que llevaba el apellido de uno de los Duques más poderosos del Imperio. Se rumoreaba, sin embargo, que ella era una niña ilegitima. La hija ilegitima de Elían, el miembro menor de la familia Theron, hijo del Duque actual. Pero nadie dijo nada nunca y ningún miembro de la familia apareció para reclamar a la niña como suya nunca también.

Por supuesto, fue obvio que ella no sería reclamada por ellos.

Caín, al igual que su tío Kane, tenía el nombre que se le otorgaba a los miembros malditos de la familia, él nombre que llevaban solo los despreciados. Al igual que su apariencia que no se parecía en nada ningún miembro de la familia Ducal.

Los Theron llevaban de forma orgullosa un cabello rubio platinado y unos ojos de un color celeste tan claro que parecía ser un tono de gris. Su belleza era como la belleza de los elfos y las hadas desde el momento de su nacimiento. Aquello era una muestra de su divinidad, la muestra inédita del legado que Derios, él Dios de la sabiduría, la creación y la sanidad, les dejó. Una muestra del linaje sagrado que llevaban en la sangre, la muestra de en ellos prevalecía la magia divina.

Jimin y Chiara pertenecían a aquella familia. Ambos eran hijos ilegítimos, niños despreciados desde el momento de su nacimiento. Niños manchados con la maldición que Delíos, el Dios de la destrucción y la muerte, le envió a la familia para vengarse de su hermano Derios tras notar que eran sus favoritos.

El cabello rubio dorado y los ojos negros o azules, los signos de la maldición que otorgaba a su portador una magia oscura capaz de producir las más terribles desgracias y destrucción. Una magia llena de caos, opuesta a aquella magia divina y llena de sanidad que la magia de la familia Theron mostraba.

Cada dos generaciones un niño maldito nacía en la familia Theron. Un niño que traería la destrucción a la familia. Un niño con una maldición que, en realidad, era una bendición si sabías como utilizarla correctamente. Pero eso nadie lo sabía, puesto que, cada niño nacido con la maldición fue asesinado sin piedad al momento de su nacimiento o algunos años después de eso. Aquello fue un secreto de la familia Theron, una verdad que nadie estaba dispuesto a admitir.

Jimin fue uno de los niños nacidos con la maldición. Su verdadero nombre era Kane Theron, era él hijo ilegitimo de Sabath Theron, la hermana menor del actual Duque Theron y de uno de los caballeros escoltas, Jimin Park, quien fue asesinado luego del nacimiento de Kane.

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⏰ Última actualización: Apr 02 ⏰

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Las luciérnagas no brillan en las manos de los monstruosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora