09

196 34 1
                                    

El llanto de Sunghoon hizo a Felix suspirar pesadamente, contó hasta tres para tranquilizarse, no podía perder la paciencia con su lindo y adorable bebé, así que rodó atrás su silla nuevamente, dejando la computadora donde se encontraba a punto de...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El llanto de Sunghoon hizo a Felix suspirar pesadamente, contó hasta tres para tranquilizarse, no podía perder la paciencia con su lindo y adorable bebé, así que rodó atrás su silla nuevamente, dejando la computadora donde se encontraba a punto de realizar su trabajo.

Desde que quedó embarazado, supo que no iba a poder volver a su trabajo en la empresa, porque la verdad no quería descuidar a su pequeño, ni dejarlo en manos de otro, simplemente quería aprovechar a su bebé mientras crecía y sabía que con todas esas horas de trabajo no iba a poder, así que optó por una opción más viable, trabajar desde casa.

Llegó hasta su habitación y en medio de su cama se encontraba Sunghoon, pataleando con desespero, aún no podía voltearse solito y eso lo inquietaba más. Caminó con rapidez para tomarlo en brazos y comenzar a mecerlo logrando que se calmara.

—Bebé, ¿Qué sucede? Te estás portando mal hoy, no dejas a papi trabajar.— Decía con voz suave, mientras secaba aquellas lágrimas que caían por sus pálidas y abultadas mejillas.

"¡Me mentiste papi! Dijiste que dormirías conmigo pero cerré los ojitos unos segundos ¡Y ya no estabas! Me sentí burlado por mi propia sangre"

El omega estaba cansado, tenía que realizar las tareas del hogar, cuidar de su trabajo y encima de Sunghoon, que la verdad no estaba siendo fácil de tratar aquél día, estando muy dependiente de él, quizás se debía a que aun habían dejes de los síntomas de sus primeros dientecitos.

Sunghoon que descansaba su cabeza en el hombro del omega estaba desconfiado, sabiendo que si cerraba los ojos, su papi se iría, y no quería eso, quería sentirlo cerca, sentir su aroma y como su omega lo arrullaba hasta sentirse protegido.

"No me dejes, por favor papi"

Pero no aguantó mucho cuando sus pesados parpados se cerraron, perdiendo así la batalla contra el sueño. Felix esperó unos minutos y lo colocó nuevamente en la cama, dejando esta vez la camisa del pijama que había usado en la noche a su lado, ya que esta contenía su aroma, lo que podría relajar al bebé por un tiempo.

Cuando por fin se pudo sentar a gusto en su silla celebró internamente, Sunghoon había estado muy apegado a él ese día específicamente, así que era feliz de al fin tener un momento de paz. Revisó en su computadora encontrando que tenía varios clientes, pues Felix se dedicaba a las ventas por internet, tenía una tienda online de objetos variados.

 Revisó en su computadora encontrando que tenía varios clientes, pues Felix se dedicaba a las ventas por internet, tenía una tienda online de objetos variados

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Baby thoughts [Minlix]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora