★Prólogo★

305 25 1
                                    

Semanas después de la desaparición de Rick.

—No creo que debas irte, cariño.

Charlie se pasó las manos por los ojos, buscando mantenerlos abiertos, pues se le cerraban solos debido al cansancio. Sus manos viajaron a su pelo, del que tiró ligeramente en un signo de frustración antes de mirar al hombre que tenía delante, preguntándose cómo demonios había acabado ahí.

—No me llames "cariño"—le peleé—. Y no voy a volver a tener a tener esta conversación contigo. Tengo que ir a buscar a mi hermano—zanjó ella con un tono muy serio. 

Él poco a poco estiró sus brazos hasta agarrar las barras de la celda que les separaba, rechistando entre dientes por no poder acercarse a ella, sentir su piel. Charlie simplemente le dedicó una mirada débil, casi rota.

—Voy a cambiar lo que dije: no vas a irte—ordenó.

Ella, ante ese falso tono autoritario, simplemente rio con incredulidad y levantó una ceja.

—No creo que estés en posición de ordenar ni exigir nada, Negan.

Él rechistó y apoyó la frente contra las barras, observándola. Lucía cómo si un millón de caminantes le hubiesen pasado por encima, tan rota... Tuvo una necesidad imperiosa de estrangular a Dixon por haberle hecho daño.

—Si te vas, es muy probable que no vuelvas. Le has dicho a todo el mundo que volverás, pero no tienes ni idea. Hay más probabilidades de que mueras a que vuelvas. ¿Realmente quieres hacer eso? A tu hermano lo puede buscar el chico ese él solo.

Charlie ante aquellas palabras abrió la boca, incrédula. No entendía cómo podía esperar que Negan entendiera su decisión, mucho menos entendía en qué momento había decidido que hablar con él había sido buena idea. Sin decir nada, se levantó y le dio la espalda, caminando hacia la puerta.

—¡Charlie! Joder, no te vayas— la mujer frenó y poco a poco se volvió hacia él, esperando una disculpa—. Es que me jode que solo te quieres ir para no verle más.

Ella arrugó la nariz, no contenta con lo que le acababa de decir.

—No todo esto es por Daryl.

Negan rápidamente negó.

—¿De verdad? ¿Y entonces por qué llevas viniendo a verme desde que se fue al bosque? ¿Por qué...?

Nunca pudo terminar de formular la pregunta, Charlie había dado una zancada hacia delante, quedando totalmente pegada a la jaula y apuntándole con un cuchillo que ni él mismo estaba seguro de dónde había salido. Negan no pudo evitar sonreír ante la irascibilidad de ella. Levantó las manos, en señal de paz y se lamió el labio.

—Esta bien—susurró, mirándola a los ojos—. Solo lo digo porque afirmabas odiarme y ahora vienes conmigo—La mirada que le dio la mujer le hizo volver a callar, respirar hondo—.Vale, si no hay forma de convencerte para que no vayas, entonces déjame ir contigo—la propuesta la cogió tan desprevenida, que poco a poco empezó a bajar el cuchillo—. Hacemos un buen equipo y ya no tenemos nada que nos amarre aquí.

Ambos estaban totalmente seguros de eso, de que hacían un buen equipo, el problema era que Charlie no lo aceptaría nunca. La mujer dio un paso atrás y le miró con las palabras atoradas en la garganta, solo pensando en Daryl. Su dolor era tan profundo que a duras penas podía respirar. Negan era la única persona con la que últimamente podía respirar. Hizo una mueca, preparándose para hablar.

—Vengo a verte porque eres la única persona que no me mira con pena o como si nunca más fuera a volver a ser la misma... como si estuviera rota.

Él la observó con cierta esperanza en el corazón.

—Eso es porque no estás rota y porque soy la única persona que se alegra de que lo hayáis dejado.

Charlie no pudo evitar reírse con suavidad. Curiosamente había encontrado consuelo en él, cosa que era peor, pues añadía sentimiento de culpabilidad a su corazón. Ella estaba segura de que, como siguiera así, en algún momento este se pararía. Le dolía tanto...

Haber discutido así con Daryl, aunque él le hubiese dicho que volviese... no podía con eso, era horrible, porque sí, era consiente de que a lo mejor, nunca volvería a verlo. Y aún con el daño y todo, le amaba, aún con todo lo que había hecho para librarse de su dolor.

—Voy a ir a por él y tu te vas a quedar aquí—concluyó ella.

Negan, que la conocía lo suficiente para saber que sería más fácil llevar un elefante en volandas, la miró con cierta decepción en los ojos. Él realmente quería que ella se quedara. Charlie, al ver que no le contestaba, asintió para despedirse, siendo totalmente consiente de que habían muchísimas probabilidades de que no lo volvería a ver, ni a él ni a nadie. Igualmente, en el fondo de su corazón, seguía esta certeza de que regresaría.

Necesitaba hacerlo, necesitaba volver a ver a Daryl.

—No vas a volver, Charlie—murmuró él—. No vas a volver. 
















¡We are back, bitches!

Llevo escribiendo esta parte de la historia desde incluso antes de terminar El Fin del Mundo. Es muy guay para mi ver que, después de tanto tiempo dándole forma y cambiándole miles de cosas, por fin voy a poder subirla. Eso sí, no está terminada, pero intentaré ser constante con las actualizaciones. Simplemente no podía esperarme tanto a subirla, tenía muchas ganas de hacerlo ya. Por no hablar del apoyo en la otra, 20k de visitas. Cuando la subí, lo hice muy al trancazo, nunca me imaginé poder llegar a tantas personas, lo cuál me hace inmensamente feliz. Muchas gracias a los que habéis estado ahí apoyando y esperando esta parte con ansias. Os adoro <3

Ahora sí, gracias por todo y espero que os guste la segunda y última parte. 

Besos, 

Bella. 

El Fin de Nosotros ★Daryl Dixon★ II parte de El Fin del MundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora