Capítulo 1

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La flora preferible y cálida y uno que otro animal allí.

Afortunadamente no hacía tanto calor como otros días.

Pero para su mala suerte, las llantas del carro había pisado una gran variedad de rocas filosas, dejándolas dañadas hasta que ya no pudiera continuar más.

Así que estaba algo frustrado, y aunque fuera el erizo más rápido del mundo, no podía dejar el carro allí en medio de la carretera.

O bueno... Si lo estaba pensando, porque no había mucho que hacer.

No tenía herramientas para arreglar o cambiar las llantas o llamar a ayuda.

Por lo que rascaba sus puas pensando en que hacer.

"Mejor no me hubiera llevado el carro"

Realmente lo uso como un método de escape.

Para escapar de Amy.

Realmente no tenía un lugar donde vivir responsablemente y se la pasaba de vago en cualquier casa de sus amigos

Ese día fue a la casa de Amy sin tomar en cuenta lo sucio que estaba por una habitual batalla contra Eggman.

Amy lo mando a bañarse.

El agua y el, no son para nada amigos. Enojar a Amy no es... Muy divertido.

Así que cambio el tema, diciendo que necesitaría su auto, teniendo tiempo suficiente para huir por la ventana.

Y que más que ir a visitar a tu mejor amigo.

Pero ahora el auto era una carga para Sonic. Carga que no se podría deshacer tan fácil.

Golpeó con molestia una parte del auto y volteo a ambos lados para ver si venía algún carro que lo ayudará.

Pero para su suerte si, hubo un carro, que venía de la misma dirección en la que estaba yendo.

Hizo algunas señas para que se detuviera.

Para cuando estuvo frente a su auto, la ventilla del otro se levantó.

–¿Sonic?

Sus orejas se levantaron por la sorpresa.

–¡Tails!

Su frustración se había ido tal como habia llegado.

–¿Que haces por aquí?

El zorro salió del auto, el cual fue abrazado rápidamente por el erizo.

–Digamos que quería visitarte pero tuve un pequeñito problemita.

Sonic se separó un poco avergonzado de pedirle ayuda indirectamente.

–¿Un carro? Eso no viene mucho de ti...

–Te explicaré luego, puedes... ¿Ayudarme a repararlo?

El amarillo rodo los ojos sonriente.

–Tienes suerte de que siempre lleve mis herramientas conmigo.

Mientras que Tails cambiaba las llantas del carro, Sonic veía el paisaje.

–Es muy bonito aquí.

–Sip, vivo aquí de hecho.

–¿En serio? ¿Tienes dos casas entonces?

El ojo verde tenía sus manos en sus caderas sonriendo.

–El otro es realmente mi taller Sonic.

El Zorro rió levemente.

𝙲𝚊𝚗𝚒𝚋𝚊𝚕𝚒𝚜𝚖 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora