Cuando Malcolm se despertó el cielo estaba perfectamente azul, completamente despejado y sin una sola nube tapando el brillo del sol que iluminaba todo al punto de que era hasta molesto para sus ojos.
En días como esos, era normal que Alex lo arrastrara al bosque para que jugaran o buscaran algo interesante —más a criterios de Alex que de Malcolm, pero interesante al fin y al cabo— que ver y, de ser posible, llevar a casa. Sin embargo, a diferencia de cualquier otro día soleado como ese, esa vez no pasaron más de unos minutos afuera antes de que empezara a nublarse el cielo.
Malcolm sabía bien cuando las nubes significaban tormenta, y sabiendo lo que venía arrastró como pudo a Alex a casa de Titi, aún cuando Alex no estaba del todo convencido que fuera a llover. El instinto del rubio resultó tener razón pues ni un minuto después de que entraran a la casa empezaron a caer las gordas gotas de lluvia, dos minutos después empezaron los rayos seguidos de los truenos.
Si el rubio estaba levemente orgulloso de su predicción acertada, no se lo hizo saber a nadie.
Con una tormenta así era obvio que no podrían volver a salir los niños si no era algún tipo de emergencia, así que acabaron sentados en el piso de la sala de la casa de Titi, con algunos libros que Malcolm había insistido tomaran del cuarto de Alex y la anciana sentada en uno de los sillones viendo la televisión. Aunque ambos niños tenían un libro cada uno, era más que claro que el pelirrojo no estaba leyendo ni una sola palabra que había impresa en las páginas.
Alex solo había tomado el libro porque Malcolm había tomado uno, y solo tuvo que abrirlo para darse cuenta de que había tomado un libro sumamente aburrido. Cómo no lo iba a saber si ya había leído el libro antes.
El niño dejó caer su cuerpo hacia atrás, desparramándose en el piso de la sala de estar de la casa de Titi, acto seguido soltó un suspiro demasiado dramático y puso el libro abierto en una página al azar sobre su rostro.
Verdaderamente seguía sin entender porque a su amigo rubio le gustaba leer tanto, y no solo eso, sino que también se tardaba mucho haciéndolo. Para Alex leer siempre había sido algo aburrido, claro que eso no le había impedido leer muchos libros, pero regularmente solo le hacía falta hojearlos una vez para entenderlos a la perfección.
Los únicos libros que nunca encontró aburridos fueron aquellos cuentos infantiles que le leía su papá por las noches, pero Alex sabía que no eran aburridos por cómo su papá los leía, Kendrick siempre se las ingeniaba para hacer ver esas historias como algo interesante. Y no solo eran interesantes porque Alex tuviera que estar atento por si a Kendrick se le ocurría hacer un "ataque de cosquillas"; esos donde le picaba las costillas hasta que le doliera el estómago de tanto reírse.
Queriendo evitar que su mente terminara pensando demasiado en el pasado, Alex se quitó el libro de la cara y se sentó para poder acercarse a Malcolm y asomarse a ver qué estaba leyendo.
—¿Es interesante? —le susurró, hablando lo suficientemente bajo como para que solo él lo escuchara. Si hacía mucho ruido Titi lo iba a regañar por interrumpir su novela.
—Hmm —murmuró él de regreso, pensando en una respuesta al mismo tiempo que pasaba la página—. No lo sé, no le entiendo.
Que no le entienda algo no es un buen criterio para decidir si algo es interesante o no, a humilde opinión de Malcolm.
El libro que había tomado era muy extraño, solo lo había tomado porque era el que se veía más simple entre los que había en la pila de donde los sacaron. Aunque probablemente se equivocó con su elección pues este libro no tenía nada de simple. Todo estaba lleno de datos históricos de diferentes personas y frases que decían cosas como: "No puedes reconocer el no ser, no puedes hablar de él, porque el pensamiento y el no ser son la misma cosa". Malcolm no tenía ni idea de qué significaba eso o de quién era esa gente.
![](https://img.wattpad.com/cover/346027046-288-k651621.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Hilos de verano
RomanceUn chico cuyos padres quieren alejar de su familia materna. Un chico que acaba de perder algo preciado de un linaje con un gran secreto. Un chico normal que ha tenido que esforzarse para probar su inteligencia. Un niño que nació siendo un genio y co...